La Diputación vizcaína tiene la intención de integrar en los próximos años a todos los municipios de la provincia en el Consorcio de Aguas de Bilbao. Uno de los argumentos que maneja es la entrada en vigor de la Directiva Marco del Agua y su política de recuperación de costes. Según el diputado de Medio Ambiente, Iosu Madariaga, el pago "a escote" hará más factible su cumplimiento, "si no, esos gastos serán excesivamente elevados en municipios más pequeños".
Madariaga y el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, han firmado un acuerdo con el Consorcio que recoge una dotación económica de 105 millones de euros por parte del gobierno foral para ejecutar un total de 43 proyectos hidráulicos que, según ha recalcado el diputado general, reflejan una "apuesta decidida" por un único consorcio de carácter territorial. El objetivo es garantizar políticas tarifarias y uniformes para todos los municipios asociados, así como servicios de calidad y de gestión del agua sostenibles y homogéneos para todos los vizcaínos.
Un total de 63 de los 112 municipios vizcaínos se encuentran ya integrados en el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia, la entidad que nació hace 41 años de la mano de una decena de consistorios del área metropolitana de Bilbao. En 1995, el PNV y la Diputación intentaron ampliar su ámbito de actuación a toda Vizcaya, pero se encontraron con el recelo de los municipios del resto del territorio, que contaban con consorcios comarcales que funcionaban bien.
Sin embargo, la realidad se ha acabado imponiendo: la cada vez mayor exigencia medioambiental en la gestión del saneamiento y una filosofía menos empresarial del consorcio han llevado a los ayuntamientos a sumarse por su propia voluntad. Así, durante los próximos meses la entidad se ampliará a 72 municipios y el próximo año se prevé dar luz verde a diez más.
