Madrid Salud realiza anualmente un 15% más de controles a los establecidos en la normativa vigente. Independientemente de las actuaciones que realiza el Canal de Isabel II, el Ayuntamiento de la Ciudad vigila que la calidad del agua del grifo sea inmejorable para los consumidores. De hecho, en más del 93% de los casos, la calidad del líquido elemento se corresponde con un nivel sobresaliente. Hasta el pasado 31 de julio, los inspectores de Madrid Salud tomaron 1.356 muestras de agua
Un 7% de las inspecciones han detectado deficiencias que no ponen en peligro la salud, aunque ocasionan molestias por el color, olor o sabor del agua. Generalmente, estas deficiencias se deben a una falta de limpieza de los depósitos interiores de edificaciones, filtros de grifos o tuberías antiguas en mal estado.
En los primeros siete meses del año, los inspectores de Madrid Salud recogieron 1.356 muestras de agua, de las que 580 correspondieron a edificaciones públicas y privadas; 210 a depósitos y estaciones del Canal de Isabel II; 200 a viviendas, 184 a instalaciones como polideportivos y hospitales; 95 en fuentes y 77 se debieron a alertas o brotes alimentarios.
Tan sólo en cuatro ocasiones, y de forma preventiva, la Ciudad de Madrid restringió el consumo de agua hasta que las anomalías descubiertas en las instalaciones interiores fueron subsanadas, con el fin evitar posibles riesgos para la salud pública.
Medidas adoptadas
Entre otras, Madrid Salud adopta las siguientes medidas para constatar que la calidad del agua que llega a los consumidores a través del grifo es perfecta:
- Control mediante muestreo en las fuentes públicas (con agua apta para beber) de los 21 distritos municipales, ubicadas en los parques, jardines públicos y la vía pública.
- Investigaciones directas en el grifo del consumidor originadas por avisos o denuncias de particulares directamente, o derivadas de las Juntas Municipales de distrito; es la manera de llegar a viviendas, edificaciones privadas o públicas y otros edificios oficiales como colegios, guarderías, Centros de Día, Centros de Mayores, centros comerciales...
- Control específico de plomo en el agua de consumo humano, en edificaciones construidas antes del año 1980.
- Inspecciones en casos de alertas alimentarias, brotes y otras emergencias que atenten a la seguridad en este ámbito, con el fin de descartar que el agua sea la causa de las mismas.
- Controles en instalaciones interiores de edificios públicos y privados a fin de descartar la incidencia negativa de los materiales de las mismas en el agua de consumo.
- Controles periódicos en estaciones oficiales de muestreo y depósitos del Canal de Isabel II, en colaboración con este organismo.