El secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, ha clausurado este viernes la Conferencia Internacional sobre Escasez de Agua y Sequía. El camino hacia la adaptación al cambio climático, junto al director general de Medio Ambiente de la Comisión Europea, Karl Falkenberg.
En su intervención, Josep Puxeu ha señalado que "el cambio climático es una realidad incuestionable", y ha considerado que "el cuidado del planeta es una obligación, y la crisis no puede ser una excusa".
El Secretario de Estado ha expresado que es tiempo de cambiar las infraestructuras, de reutilización, de desalinización, de ahorro de agua y energía, y ha explicado que estas políticas no se pueden rehuir.
Asimismo, la directora general del Agua del MARM, Marta Moren, ha analizado las líneas generales de las conclusiones de unas jornadas que, según ha afirmado, "han puesto en evidencia la importancia del agua para el desarrollo social y económico de las poblaciones, para el mantenimiento de los ecosistemas y han subrayado el carácter clave de su correcta administración".
Estas líneas generales apuntan a que la escasez del agua y la sequía son problemas muy importantes en muchas regiones europeas y, si bien no pueden ser evitadas, sus impactos y consecuencias pueden reducirse considerablemente.
En este contexto, la nueva Política Agraria Común de la Unión Europea se perfila como un importante aliado para promover el uso más eficiente y sostenible del agua en la agricultura, aunque las decisiones que se adopten han de basarse en datos refrendados que provengan de la investigación.
Por otra parte, los Planes de gestión de cuenca se convierten en herramientas imprescindibles para la correcta gestión del agua, que deben complementarse con Planes de gestión de la sequía.
Además, se hace necesario un sistema de alerta temprana de la sequía a nivel europeo que permita poner en marcha los programas de medidas para mitigar estas situaciones.
Por último, las líneas generales de las conclusiones contemplan la revisión de la Directiva Marco del Agua en 2012 como una excelente oportunidad para profundizar en la consideración de las sequías en el marco legislativo comunitario.
