El Gobierno de Marruecos ha seleccionado un proyecto promovido por España, Francia y Rumanía que va a ir dirigido a mejorar la gobernanza y la gestión de sus recursos hídricos.
Se trata de un proyecto que lleva por título “Gobernanza y gestión integrada de los recursos de agua en Marruecos”, y que forma parte de los programas de hermanamiento (twinning) creados por la Comisión Europea y destinados a fortalecer las relaciones bilaterales de este país con la Unión Europea.
El objetivo de este trabajo, que cuenta con un presupuesto de más de 1,1 millones de euros, es aproximar la reglamentación y los sistemas institucionales de organización y de gestión integrada de los recursos hídricos que se llevan a cabo en Marruecos con los que se aplican en el seno de la Unión Europea.
La elección por parte del gobierno marroquí de este proyecto consolida las excelentes relaciones que mantiene nuestro país en general y el MAGRAMA en particular con el país vecino
Para ello, a lo largo de los dos próximos años se llevarán a cabo una serie de actividades como un detallado análisis de las diferencias jurídicas e institucionales que existen entre Marruecos y la UE, un proyecto de plan de gestión para una de las cuencas más importantes del país, la del río Sebou, con 38.380 km2 de superficie y más de 5,7 millones de habitantes y un programa nacional para la convergencia reglamentaria en el sector del agua.
La elección por parte del gobierno marroquí de este proyecto promovido por España consolida las excelentes relaciones que mantiene nuestro país en general y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en particular con el país vecino con el que compartimos en el ámbito hidrológico y climático muchas más similitudes que diferencias.
Así, ambos países, en el ámbito bilateral están negociando en la actualidad un acuerdo de cooperación en materia de recursos hídricos. Mientras que, en el ámbito multilateral mantienen una línea común de trabajo en foros tan destacados como el Diálogo 5+5, para la adopción de una Estrategia del Agua en el Mediterráneo Occidental que aspira a instaurar un tipo de crecimiento basado en un modelo de desarrollo respetuoso con el medio ambiente y eficaz a la hora de adaptarse a los retos del cambio climático.
Además, ambos países también mantienen una línea de trabajo común en el Comité de Dirección del Sistema Mediterráneo de Información del Agua (SEMIDE), en la Unión por el Mediterráneo o en el recientemente celebrado II Foro Mediterráneo del Agua, preludio del VII Foro Mundial del agua que se celebrará en Corea del Sur el próximo mes de abril, en el que todos los participantes han coincidido en destacar la importancia de que los países mediterráneos adopten una estrategia común a la hora de gestionar el agua y, lo que es más importante, a la hora de defender sus singularidades como región ante el resto del mundo.
Una colaboración en la que también tienen cabida las empresas españolas, que ya han demostrado su eficacia a la hora de plantear soluciones alternativas que palien la falta de recursos hídricos que sufren determinadas zonas del área mediterránea de nuestro país y que son fácilmente exportables a Marruecos un país caracterizado por la escasez de recursos hídricos y el aumento de la demanda de agua que está fomentando el uso de sistemas alternativos para cubrir las demandas.
