Los embalses de la Cuenca del Segura finalizaron el año hidrológico con unas existencias de 516 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, lo que supone un aumento de 23 hectómetros respecto a las reservas con las que contaban el 30 de septiembre de 2010. Estos datos han sido presentados a la Junta de Explotación de las vegas del río Segura, Mundo y Quípar, reunida con motivo del fin del año hidrológico 2010-2011.
Sin embargo, a pesar de la mejora de las reservas, hay que reseñar que las aportaciones anuales (453 hm3) han disminuido respecto al periodo 2009-2010 (653 hm3), lo que ha llevado a la CHS a mantener las medidas de prudencia en la gestión de los recursos hídricos. Se debe resaltar que reducción de las aportaciones no supone que 2010-2011 haya sido un mal año hidrológico, sino que el anterior ejercicio 2009-2010 fue excepcional (el 15 mejor de la serie histórica de los últimos 81 años), mientras que el que acaba de terminar, sin llegar a ser tan bueno, se sitúa claramente por encima de la media, y mucho más si lo comparamos con los de la última sequía sufrida en la cuenca, con aportaciones que llegaron a ser inferiores a los 200 hectómetros.