La Water Environment Federation (WEF), seguramente la entidad que acoge al mayor número de operadores de depuradoras de aguas residuales del mundo, ha publicado un documento en el que se analizan algunos aspectos relacionados con el coronavirus y se incide de forma muy especial en la relación que este virus tiene con los profesionales de la calidad de las aguas.
El 19 de febrero de 2020, WEF publicó "The Water Professional's Guide to COVID-19", una guía destinada a aumentar la conciencia del sector del agua sobre el virus COVID-19 y cualquier problema relacionado con el agua y las aguas residuales y los recursos relevantes.
Las investigaciones aún no ha encontrado evidencia de supervivencia del virus en las heces y en los sistemas de aguas residuales, sin embargo, se están realizando esfuerzos para evaluar el riesgo relativo de exposición a las aguas residuales.
La investigación en el tema está en curso, pero los expertos consideran que la exposición al agua residual no es una ruta de transmisión significativa para el virus de la COVID-19. En ese sentido, no se recomiendan protecciones específicas contra el coronavirus para los trabajadores que trabajan en sistemas de tratamiento de aguas residuales. Sin embargo, es adecuada una mayor vigilancia en cumplimiento de los procedimientos de protección personal existentes para controlar la exposición.
ADECAGUA, la asociación de la WEF en España, recomienda este informe a todo el sector vinculado a las aguas residuales para un mejor conocimiento de sus riesgos y formas de protegerse.
