El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Juan Ramón Hernández, anunció hoy martes en el Parlamento, que el Departamento regional ha elaborado un Plan de Regadíos para el Archipiélago que se desarrollará en el período 2014-2020.
Es respuesta a una pregunta parlamentaria, el titular del Área explicó que esta iniciativa recoge 60 actuaciones en todas las Islas, por un importe de 104 millones de euros. Asimismo, se añade al documento definitivo un Programa de Formación y Transferencia de Tecnología de Riego, con un importe previsto de 0,5 millones de euros.
"El Plan está terminado, sólo a falta de recibir el Informe de Sostenibilidad Ambiental (ISA) que estimamos esté concluido sobre el 28 mayo y esperamos poder enviarlo para su publicación en el Boletín Oficial de Canarias, para el trámite de consultas, a mediados del mes próximo", señaló Hernández.
Se trata de un texto de planificación estratégica con el que el Ejecutivo regional pretende establecer los objetivos y directrices que deberán orientar las actuaciones en materia de mejora de regadíos en este espacio temporal.
En Canarias se riegan unas 27.000 hectáreas, algo más del 60% de la superficie total cultivada, siendo el regadío el principal consumidor de agua a nivel regional, aunque no en todo el Archipiélago. La situación de los acuíferos insulares, ya sobreexplotados en algunas islas, y la competitividad de las explotaciones agrarias de regadío, obliga a tener presente en este proyecto que el agua representa un capítulo importante en su estructura de costes.
En definitiva, esta iniciativa se elaboró ante la necesidad de garantizar el uso sostenible de los recursos hidráulicos, la seguridad alimentaria, el equilibrio territorial, la adaptación al cambio climático y las necesidades objetivas del sector, junto con la obligación de avanzar hacia una agricultura cada vez más sostenible y respetuosa con el medioambiente.
La elaboración del Plan se planteó a partir de los Catálogos Insulares de Actuaciones en materia de Regadíos que, en el año 2011, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias encargó, para cada una de las islas, con excepción de Tenerife (que actualizó el proyecto que ya había realizado esta institución en 2009). Estos trabajos consistieron en un análisis de la situación del regadío en cada isla, estudiando lo que establecen los Planes Hidrológicos Insulares en la materia.
Hasta llegar al documento definitivo, se realizaron tres fases de trabajo en las que se depuraron las actuaciones para cada isla a partir de las determinaciones de los Planes Hidrológicos correspondientes, efectuando varias selecciones en reuniones celebradas, para cada isla, con los técnicos de los Servicios Agrarios de los respectivos Cabildos Insulares y con los técnicos del Gobierno de Canarias, donde se verificó que las actuaciones resultantes fueran coherentes con las previsiones financieras para el período 2014-2020 y con el equilibrio territorial en la distribución de las inversiones.