Connecting Waterpeople
CAF
ICEX España Exportación e Inversiones
Molecor
Global Omnium
Catalan Water Partnership
Fundación Botín
Idrica
ISMedioambiente
Amiblu
Ingeteam
RENOLIT ALKORPLAN
TEDAGUA
Centro Nacional de Tecnología de Regadíos (CENTER)
IAPsolutions
EPG Salinas
Minsait
Baseform
Vector Energy
Barmatec
ESAMUR
ADECAGUA
Saint Gobain PAM
Schneider Electric
Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia
Lama Sistemas de Filtrado
FENACORE
Likitech
KISTERS
Sacyr Agua
GS Inima Environment
FLOVAC
TRANSWATER
AECID
Fundación Biodiversidad
Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico
Cajamar Innova
DATAKORUM
Red Control
AGS Water Solutions
Almar Water Solutions
AMPHOS 21
Rädlinger primus line GmbH
Agencia Vasca del Agua
TecnoConverting
SCRATS
Hach
s::can Iberia Sistemas de Medición
Hidroconta
ONGAWA
J. Huesa Water Technology
Laboratorios Tecnológicos de Levante
Asociación de Ciencias Ambientales
Sivortex Sistemes Integrals
HRS Heat Exchangers
Aqualia
ADASA
Fundación CONAMA
MOLEAER
IRTA
Aganova
Xylem Water Solutions España
Confederación Hidrográfica del Segura
Kamstrup
ACCIONA
Hidroglobal
Grupo Mejoras
Innovyze, an Autodesk company
Filtralite
LACROIX

Se encuentra usted aquí

El agua embotellada tiene más polonio radiactivo que la del grifo

Sobre la Entidad

Agencia Sinc
El Servicio de Información y Noticias Científicas (SINC) es la primera agencia pública de ámbito estatal especializada en información sobre ciencia, tecnología e innovación en español.
  • Investigadores del Centro Nacional de Aceleradores y la Universidad de Sevilla han analizado los niveles del polonio radiactivo 210Po en 32 marcas de agua mineral.
  • Los resultados revelan que las concentraciones de esta sustancia nociva en algunas muestras superan más de 100 veces a las que hay en el agua del grifo, aunque siempre muy por debajo de los valores peligrosos.

El polonio-210 (210Po) se ha hecho popular por casos como la muerte del espía ruso Aleksandr Litvinenko, envenenado con este radionúclido altamente tóxico, y el del histórico líder palestino Yasser Arafat, que pudo correr la misma suerte.

Este isotopo se presenta de forma natural en pequeñas trazas en el agua, el suelo y la atmósfera, aunque cuando se acumula –por ingestión o inhalación– en distintas partes del cuerpo (hígado, bazo, riñones y médula) puede originar daños celulares.

Ahora, investigadores de la Universidad de Sevilla (US) y el Centro Nacional de Aceleradores (CNA, centro mixto US-Junta de Andalucía-CSIC) han evaluado la dosis de polonio-210 que recibe la población española por consumir agua mineral embotellada. Las muestras se han recogido en botellas de 32 marcas comerciales.

Los resultados, que publica la revista Radiation Protection Dosimetry, muestran que las concentraciones de 210Po oscilan entre los 0,6 y 40 milibecquerelios (mBq) por litro. Esta cantidad es similar a la de otras aguas minerales europeas y quedan lejos de los límites considerados como peligrosos, aunque tampoco hay una legislación clara al respecto.

Aun así, el estudio confirma que la cantidad de polonio-210 en el agua embotellada es muy superior a la del agua del grifo, que en general no suele superar 1 mBq/L. La de Sevilla, por ejemplo, es 0,25 mBq/L.

“Las diferencia se debe a que el agua del grifo está tratada y potabilizada”, explica Rafael García Tenorio, investigador del CNA, quien insiste en que los niveles más altos de 210Po en el agua mineral, como ocurre con el potasio, el sodio y otros elementos, aparecen de forma natural. Se incorporan al agua embotellada desde las rocas de los acuíferos y manantiales.

Los investigadores también han comparado la aportación a la dosis recibida de este radionúclido nocivo respecto a la de otros dos radioisótopos, el uranio 234 y 238, presentes también en el agua.

“Aunque los niveles de 210Po son inferiores a los de uranio en el agua mineral embotellada, su contribución a la dosis comprometida por ingestión es claramente superior, siendo estas dosis de polonio-210 del agua embotellada superiores a las del agua potable de nuestras viviendas”, recalca la investigadora del Grupo de Física Nuclear Aplicada de la US, Inmaculada Díaz Francés.

Los datos también revelan que los niños de entre uno y siete años reciben una dosis mayor que el resto (hasta 100 microSv/año si consumieran algunas marcas) debido a su menor masa corporal. "Frente a estos resultados llaman la atención las múltiples campañas que se hacen recomendando el consumo de agua embotellada frente a la potable de grifo, sobre todo en niños", dicen los autores. En general, el coeficiente de dosis de radiación recibida disminuye con la edad, y se establece un valor de referencia de 1.000 microSv/año, a partir del cual es necesario adoptar medidas de protección radiológica.

Según los investigadores, el estudio reafirma que el polonio-210 es uno de los mayores contribuyentes a la dosis de radiación por consumo de agua mineral embotellada, por lo que resulta “imprescindible” vigilar sus concentraciones .

Referencia bibliográfica:

I. Díaz-Francés, J. Mantero, G. Manjón, J. Díaz, R. García-Tenorio. “210Po and 238U isotope concentrations in commercial bottled mineral water samples in Spain and their dose contribution”. Radiation Protection Dosimetry 1-7, 2013. Doi:10.1093/rpd/nct075 

La redacción recomienda

25/01/2024 · Investigación

Las aguas subterráneas se agotan de forma acelerada en todo el planeta