América Latina es una de las regiones con mayor potencial hidroeléctrico del mundo pero sólo ha desarrollado un 23% de su capacidad.
Entre los principales factores que impiden el desarrollo de ese potencial destacan los relacionados con el retraso de numerosos proyectos de generación de energía hidroeléctrica, la dificultad para obtener licencias ambientales o los conflictos con las comunidades afectadas directamente por los emprendimientos.
Con el fin de alcanzar el máximo potencial de la región, el Programa de Hidroenergía Sostenible deCAF -banco de desarrollo de América Latina- ha identificado las áreas más adecuadas para llevar a cabo futuros proyectos, y ya está trabajando en Bolivia, Perú, el estado de São Paulo en Brasil, la cuenca del río Bermejo en Argentina y la cuenca binacional entre República Dominicana y Haití.
Entre los aspectos prioritarios del proyecto están las necesidades energéticas del uso del agua, no solo para abastecimiento, sino también para su uso productivo, como es el regadío.
En este sentido los principales desafíos son: mejorar la gestión de los recursos hídricos, laconstrucción de la infraestructura o la asignación de agua a toda la gama de sectores productivos, con la finalidad de fomentar un crecimiento económico sostenible e inclusivo. Esto se dificulta en países con déficit de recursos hídricos que limitan el desarrollo del uso del agua como fuente para la producción energética.
Para asumir ese reto es necesaria una planificación coordinada y de largo plazo por parte de las autoridades de los sectores energéticos y de recursos hídricos, en la que se adelanten los estudios y actividades para eliminar incertidumbres durante la ejecución de los proyectos. Este proceso debe ir acompañado por la interacción y apoyo mutuo entre estas autoridades y las comunidades afectadas, de manera que se atiendan los problemas más urgentes y se enfrenten con éxito los conflictos futuros.
La importancia de la generación hidroeléctrica en la matriz energética de América Latina, La publicación Agua y Energía, destacando su potencial de crecimiento. Asimismo, señala la tendencia en la región de utilizar fuentes alternativas y de hacer uso eficiente de la energía y del agua para su producción, mediante un desarrollo armónico de las distintas fuentes energéticas. Adicionalmente destaca el rol de los proyectos multipropósito para la seguridad en el acceso al recurso, además de la regulación necesaria de los caudales de los ríos y la distribución del recurso para los diferentes usos (agrícola, industrial, energético y de consumo humano).
