El coordinador residente de Naciones Unidas en Corea del Norte, Tapan Mishra, indicó que tres meses después del paso del tifón Lionrock por la provincia de Hamgyong, las agencias de la ONU continúan proporcionando alimentos, refugio, medicinas, saneamiento y ropa de invierno a los afectados.
En un comunicado, el funcionario de la ONU también destacó que tras la destrucción de unas 12.000 casas por las torrenciales lluvias e inundaciones, las autoridades locales han anunciado que las familias han recibido nuevos hogares.
Al concluir una visita a las zonas afectadas conjuntamente con representantes del Gobierno y los organismos humanitarios, Mishra sostuvo que a pesar del destacado trabajo realizado por las autoridades, aún se necesita de apoyo adicional.
El coordinador de la ONU explicó que pudo constatar durante la visita que más de 27.000 hectáreas de tierras cultivables quedaron inundadas, que la mayoría del ganado murió, que la red de suministro de agua potable está parcialmente afectada y que se necesitan medicinas y alimentos para prevenir la malnutrición y la aparición de enfermedades.
Naciones Unidas emitió un plan de respuesta humanitaria para ese país el pasado 19 de septiembre por un total de 29 millones de dólares de los cuales se han recaudado 12 millones hasta el momento.