Mediante el uso de un conjunto de modelos de ordenador, un estudio dirigido por la Universidad de California Riverside, en Estados Unidos, ha encontrado que la mayoría de especies de aerosol aumentarán bajo el cambio climático vinculado con el calentamiento global inducido por gases de efecto invernadero (GEI).
Los aerosoles, pequeñas partículas sólidas y líquidas en suspensión en la atmósfera, impactan en el medio ambiente al afectar a la calidad del aire y alterar el balance radiativo de la Tierra, bien por dispersión o absorción de la luz solar en diversos grados. Investigaciones anteriores realizadas sobre modelos climáticos han encontrado resultados contradictorios: dependiendo del modelo, el cambio climático se asoció con un incremento o una disminución de la carga de aerosoles.
Pero la nueva investigación con los modelos por ordenador más nuevos y vanguardistas, que se publica este lunes en 'Nature Climate Change', muestra que bajo el cambio climático asociado con el calentamiento inducido por los gases de efecto invernadero, la mayoría de las especies de aerosol registrarán un fuerte aumento, con implicaciones para la calidad del aire en el futuro.
"Nuestro trabajo en los modelos muestra que casi todas las especies de aerosol aumentarán bajo el cambio climático inducido por gases de efecto invernadero", resume el climatólogo Robert J. Allen, profesor asistente en el Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de California, Riverside y autor principal de este trabajo de investigación.
"Esto incluye aerosoles naturales, como el polvo y la sal del mar, y también los aerosoles antropogénicos, como sulfato, negro de carbón y materia orgánica primaria. Se necesitarán reducciones más estrictas en las emisiones de aerosoles para alcanzar el nivel deseado de calidad del aire a través del siglo 21", advierte.
Allen explica que una subida de los gases de efecto invernadero no sólo calentará el planeta, sino que también afectará el clima de muchas maneras diferentes. Por ejemplo, los GEI darán lugar a cambios en el ciclo hidrológico y la circulación atmosférica a gran escala. Estos cambios, a su vez, afectarán a la calidad del aire y la distribución de aerosoles, independientemente de los cambios en las emisiones de aerosoles.
"Los cambios en el ciclo hidrológico y la circulación atmosférica son complejos, pero podrían dar lugar a cambios opuestos en la distribución de los aerosoles --apunta--. Los modelos muestran que el calentamiento de GEI conducirá a una mayor precipitación media global, que debería reducir la carga de aerosoles porque los aerosoles están suspendidos por la lluvia. Sin embargo, el calentamiento de GEI también conducirá a una disminución de las precipitaciones en algunas regiones, así como una disminución media global en la frecuencia de las precipitaciones. Estos dos últimos cambios, que se espera que eleven la carga de aerosoles atmosféricos, son mayores que el anterior cambio. El resultado es más aerosoles en la atmósfera".
Estos expertos asocian este aumento de los aerosoles a una disminución en la eliminación húmeda de aerosol, el mecanismo de extracción primaria, que es impulsado por una caída de las precipitaciones a gran escala sobre la tierra, sobre todo durante los meses de verano del hemisferio norte, junio, julio y agosto.