La colaboración entre el Laboratorio Ibérico de Nanotecnología de Braga (Portugal) y el Instituto Tecnológico de Galicia, a través del proyecto WaterNanoEnv, permitirá conseguir este año un prototipo para detectar en tiempo real contaminación en embalses, así como analizar con mayor precisión los efectos de las nanotoxinas en las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR), para lo cual en noviembre se pondrá en marcha un grupo internacional de expertos.
De ello ha informado en Santiago el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, tras una reunión de evaluación de esta colaboración iniciada el año pasado para aprovechar "el conocimiento" de ambos organismos en el marco de cuatro proyectos enmarcados en un acuerdo que cuenta con tres millones de euros.
Así, se trabaja con el objetivo de hacer más segura el agua de la Comunidad gallega, mediante la detección temprana de contaminantes como cianotoxinas y bacterias E-Coli en embalses con el uso de nanosensores. En las EDAR se buscarán residuos tanto en el propio funcionamiento de las plantas como en su vuelta al mar.
Entre otros proyectos, esta iniciativa prevé también la prestación de servicios avanzados a la industria biomédica, el diseño de nuevas herramientas para el diagnóstico y tratamiento del cáncer y del ictus, así como nuevos alimentos obtenidos de recurso marinos.
Además, el conselleiro de Economía ha puesto en valor que estos estudios desarrollarán una tecnología que "pueda transferirse al mercado y tener un impacto sobre el tejido productivo". En concreto, el WaterNanoEnv prevé crear y mantener más de 40 empleos cualificados.
Asimismo, Conde ha destacado que el Instituto Tecnológico de Galicia cumple 25 años como un referente en el tratamiento del ciclo del agua, en colaboración con una iniciativa de innovación en la que también participa la Universidade de Santiago de Compostela.