La Agencia Catalana del Agua (ACA), comprometida con la seguridad de sus trabajadores, visitantes y operarios externos, ha instalado protecciones anticaída en las galerías perimetrales de la Baells (Berguedà) y la Llosa del Cavall (Solsonès).
Con pendientes de más del 50% en algunos tramos, y como riesgo recogido en la Evaluación de Riesgos de cada centro como tal, se ha dispuesto de barandillas y puertas cada 3,5 metros de desnivel en los aproximadamente 100 metros de diferencia de cota existente entre los accesos al interior de cada toma y los puntos más bajos de las mismas.
El sistema elegido a las dos tomas consiste en puertas correderas con cierre automático pero sin ningún mecanismo ni motor, un aspecto novedoso ya que no requiere ningún mecanismo ni motor por su cierre, garantizando que al paso de cada persona las puertas queden cerradas y preparadas por cumplimiento de su misión.