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Las obras del Ibaizabal aumentan la seguridad de la población y las empresas de Basauri y Galdakao

  • obras Ibaizabal aumentan seguridad población y empresas Basauri y Galdakao
  • El consejero ha anunciado que el proyecto para acometer la tercera fase se definirá en 2017 y que las obras arrancarán antes de que finalice el año 2018.

Sobre la Entidad

Agencia Vasca del Agua
El equipo de personas que constituyen la Agencia tiene por objeto llevar a cabo la política del agua en Euskadi y lograr un medio acuático en buen estado, en estrecha coordinación con las Confederaciones Hidrográficas del Cantábrico y del Ebro.

Iñaki Arriola, consejero de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno Vasco y presidente de URA, ha visitado esta mañana junto al alcalde de Basauri, Andoni Busquet, las obras de la II fase para la defensa ante las crecidas del Ibaizabal a su paso por ambos municipios, que acaban de concluir.

Acompañado por el cuerpo técnico de URA, el consejero ha comprobado las labores de ensanchamiento del cauce realizadas a lo largo de kilómetro y medio del Ibaizabal. Las actuaciones realizadas han permitido doblar la capacidad hidráulica del río, que pasa de 600 metros cúbicos por segundo a 1200 m³/s y dar cabida a los caudales de crecidas con un periodo de retorno de 500 años (T500). La intervención ha supuesto asimismo la sustitución de los antiguos puentes de Urbi y Bridgestone por dos nuevos con una mayor capacidad hidráulica; la aminoración de un azud de cuatro metros, que generaba una elevación de la lámina de agua muy significativa en el tramo; la recogida de aguas residuales y su derivación al sistema de saneamiento general, y la revegetación de las márgenes una vez concluida la actuación de mejora hidráulica.

Arriola ha señalado que “estas obras van a incrementar el umbral de seguridad de la población y las empresas de Basauri y Galdakao cuando el Ibaizabal baje crecido, evitando las inundaciones que eran frecuentes hasta ahora en la zona”.

El consejero ha aprovechado la visita para anunciar que el proyecto para acometer las obras de la tercera fase del plan anticrecidas del Ibaizabal, aguas arriba de la fase ahora concluida, se elaborará a lo largo de este año y que las obras arrancarán antes de que finalice el año 2018.

Esta tercera fase, cuyo presupuesto de licitación rondará los 12 millones de euros, incluye obras de mejora de la función hidraúlica y capacidad de desagüe del río Ibaizabal en el tramo de kilómetro y medio comprendido entre el azud de Bengoetxe y Plazakoetxe, en Galdakao. Además, dentro de las actuaciones se incluye el aumento de la capacidad y rehabilitación del puente de Mercadillo o Bengoetxe, mediante la ejecución de un nuevo ojo que permita la conservación de la estructura de la fábrica histórica, preservando su valor patrimonial y cultural. La capacidad hidraúlica se doblará con el objetivo de acoger los caudales de las avenidas con un periodo de retorno de 100 años.

Las inundaciones son el riesgo natural más importante en Euskadi. Nuestras cuencas, sobre todo en la vertiente cantábrica, son pequeñas, y tienen un gran desnivel. Además llueve de forma abundante y, a veces, con mucha intensidad. Como consecuencia de ello, en ocasiones los ríos originan inundaciones, que son algo natural pero causan importantes daños a las viviendas, empresas e infraestructuras que han ocupado las zonas inundables.

“De ahí la importancia -ha afirmado Arriola- de que las Administraciones y la ciudadanía convivamos con los ríos y nos adaptemos a la recurrencia natural de sus crecidas; necesitamos respetar las zonas inundables donde las riadas se expanden. No solo porque aportan seguridad a personas e infraestructuras o nos permiten recuperar espacios de gran valor natural, sino también por precaución y para evitar tener que invertir y alterar los ríos en el futuro para la defensa ante inundaciones de nuevos entornos urbanos”.

Arriola ha destacado que “el Gobierno Vasco, a través de URA, seguirá interviniendo en aquellas zonas de expansión natural de los ríos que se han ocupado y en las que las crecidas suponen un riesgo para las personas y los establecimientos allí situados”.

Ha recordado el consejero que, “en Euskadi, el catálogo de áreas pendientes de defensa ante las crecidas recurrentes y naturales de nuestros ríos es amplio”, y que las inversiones necesarias para llevar a cabo estas actuaciones “son muy altas”. “El compromiso del Gobierno para actuar en ellas es firme. Pero al mismo tiempo debemos concertar esfuerzos entre todas las administraciones y la ciudadanía para evitar que sumemos alguna zona más a ese ya amplio catálogo de áreas de riesgo”.

En la legislatura anterior se aprobaron los Planes Hidrológicos y los Planes de Gestión del Riesgo para todo el territorio de Euskadi. Gracias a estos instrumentos de gestión, la administración hidráulica vela, básicamente por:

  • La prevención de la exposición de nuevo usos a las inundaciones, evitando nuevos usos sensibles en territorios que el río naturalmente hace suyos e impidiendo que el catálogo de lo ya expuesto al riesgo aumente.
  • La protección frente a las inundaciones de aquellos usos consolidados en los entornos de expansión natural de los ríos, siempre con los medios menos agresivos posibles para el río (priorizando actuaciones donde más gente vive y más riesgo existe).
  • La preparación ante las inundaciones, mejorando constantemente la predicción hidrometeorológica (hasta dónde llegará en el territorio la precipitación de un episodio de aguas altas) y mejorando en lo posible los sistemas de alerta a la población.
  • Aprender de cada uno de los episodios de aguas altas, incrementando el acervo de datos que mejoren predicción y la toma de decisiones de los sistemas de protección civil en futuros episodios.

URA tiene entre sus cometidos informar todos los usos nuevos que busquen situarse en territorio aledaño a los ríos y autorizar solo aquéllos compatibles con la dinámica fluvial, velando porque no aumenten usos sensibles en espacios donde los ríos han de crecer.

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