Mucho se ha oído de los desalojados de Jánovas, se ha publicado en prensa, radio y televisión; Jordi Évole le dedicó uno de los programas más famosos de Salvados. Hace más de 60 años, los vecinos de este pueblo del Pirineo Aragonés tuvieron que abandonar sus casas porque estaban en la zona de inundación de un pantano que nunca se llegó a construir. Y ese pantano no se llegó a construir porque, 50 años más tarde de la primera redacción del proyecto, expropiación de las tierras y desalojo de los diferentes municipios afectados, se desestimó por un informe medioambiental negativo.
Estos desalojados nunca han cesado en el empeño de volver a ver con vida su pueblo. Casas derruidas, sin suministro eléctrico ni agua, vegetación creciendo por las calles…y aún así, algunos de ellos han comenzado la reconstrucción de las casas de sus padres o abuelos. Las antiguas escuelas ya están reformadas y se han convertido en la “casa del pueblo” donde los vecinos se reúnen o preparan comidas y miran al futuro pensando en un pueblo reconstruido en un futuro cercano.
Gracias a la labor de las Administraciones, principalmente a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y al Ayuntamiento de Fiscal, y a la perseverancia de los afectados, Jánovas está volviendo a nacer.
Aunque la presa de Jánovas nunca se construyó sí se hizo la ataguía y el túnel de desvío del río, ataguía que se rompió tras una avenida del río Ara a finales de los 90
En 2008 la Confederación Hidrográfica del Ebro comenzaba con la pionera idea de devolver todo un pueblo a sus antiguos habitantes e inició el proceso de reversión a unos 115 afectados que así lo solicitaron, proceso que en la actualidad no ha finalizado y que está lleno de dificultades jurídicas, que se están afrontado con garantías.
Englobada en la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos se desarrolla, en la Cuenca del Ebro, el proyecto de “Restauración del Río Ara en la ubicación de la presa de Jánovas (T.M. de Fiscal, Huesca)” con el objeto de restaurar las áreas afectadas, directa o indirectamente, por la construcción de obras auxiliares de la fallida presa de Jánovas, propiciando o potenciando, según los casos, las condiciones necesarias para recrear la morfología y biota natural de dichos terrenos y reducir el riesgo de erosión fluvial del entorno ribereño.
Aunque la presa de Jánovas nunca se construyó sí se hizo la ataguía y el túnel de desvío del río, ataguía que se rompió tras una avenida del río Ara a finales de los 90.
En las obras integradas en este proyecto como primera actuación se desmontó la ataguía existente y se realizó la restauración morfológica de la ribera. Esta actuación se ejecutó con medios propios de la CHE, con su Unidad de Parque de Maquinaria, que dispuso sus máquinas de movimiento de tierras con ese fin.
INCLAM actuó como Asistencia a la Dirección de Obra y Coordinador de Seguridad y Salud, realizando el seguimiento y control de las obras y de las condiciones de seguridad de la obra
El desmontaje de la ataguía consistió en la eliminación de los restos existentes, moviendo unos 55.000 m3. El material extraído se separó usando las piedras de mayor tamaño como escollera en la protección de las márgenes del río Ara y en la construcción de un vado provisional, otra parte depositándola en las antiguas canteras de donde se extrajo para la construcción de la ataguía y, por último, echándolas en ambas márgenes para el acondicionamiento de las parcelas originales. INCLAM actuó como Asistencia a la Dirección de Obra y Coordinador de Seguridad y Salud, realizando el seguimiento y control de las obras y de las condiciones de seguridad de la obra.
Para la ejecución de esta actuación siempre se tuvo en cuenta la configuración original del entorno. Acudiendo a información fotográfica y bibliográfica del entorno de Jánovas antes de la construcción de la ataguía se pretendía que la morfología quedara como se mostraban en las fotos de los años 50.
Hay muchas más actuaciones que, definidas por los técnicos de INCLAM, van a propiciar la vuelta a la vida de Jánovas. Entre ellas están el abastecimiento a los municipios abandonados, acceso a las poblaciones, urbanización delos mismos, suministro eléctrico, depuradoras, etc.
Con la demolición de la ataguía, la restauración morfológica de riberas y el acondicionamiento de varias parcelas según las fotografías antiguas comienza una nueva etapa en la vida de Jánovas. Aún hay mucho por hacer pero, poco a poco y con el trabajo de todos, el sueño de muchos janovasinos que se vieron obligados a abandonar su hogar se podrá hacer realidad.