La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha informado de que 12 municipios de la comarca del Alt Empordà (Girona) que dependen del embalse Darnius Boadella pasarán a fase 2 del estado de emergencia por sequía, y tendrán una limitación de consumo de agua de 180 litros por persona y día.
Lo ha dicho en rueda de prensa en la Generalitat tras la reunión este jueves de la comisión interdepartamental de la sequía, junto al secretario general de Acción Climática de la Generalitat, Josep Vidal, y el secretario de Empresa y Competitividad, Albert Castellanos, en la que ha destacado que la situación de sequía en Catalunya «lejos de mejorar empeora».
Los municipios que entran en fase 2 son Figueres, Roses, Cadaqués, Castelló d'Empúries, Cabanes, el Far d'Empordà, Fortià, Llers, Riumors, Santa Llogaia d'Àlguema, Vila-sacra y Vilamalla.
Plaja ha informado de que la emergencia 2 por sequía se declara en estos 12 municipios después de que el embalse Darnius Boadella haya llegado al 11% de su capacidad, lo que «supone un cambio de escenario respecto a la situación actual que había», pasando de los 200 litros de agua por persona y día a 180 en estas localidades, incluyendo actividades económicas y comerciales.
La portavoz ha recordado que estos 12 municipios del Alt Empordà son «los primeros» de Cataluña en entrar en la fase 2 de emergencia por sequía, y ha detallado que este nuevo escenario entrará en vigor previsiblemente la semana que viene, cuando se publique en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (Dogc).
Estos 12 municipios del Alt Empordà son «los primeros» de Catalunya en entrar en la fase 2 de emergencia por sequía
Ha asegurado que este mismo jueves está prevista una reunión de los representantes de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) con los municipios afectados por el nuevo estado, y ha defendido que el Govern trabaja con «anticipación, previsión y trabajo continuado» para hacer frente a la sequía.
Medidas
Plaja ha explicado que para «intentar minimizar la situación» en estos municipios, se prevé construir nuevos pozos para alimentar las tres redes de las que depende el acuífero Fluvià-Muga, y el agua captada se tratará en la depuradora de Figueres (Girona).
Ha recordado que en la fase 2 de la emergencia queda prohibido el riego de jardines y zonas verdes, tanto públicas como privadas, excepto el riego de supervivencia para arbolado y jardines botánicos públicos, pero solo con aguas regeneradas y freáticas.
En la fase 2 de la emergencia queda prohibido el riego de jardines y zonas verdes, tanto públicas como privadas
También está prohibido el llenado parcial o total de todo tipo de piscinas y solo se permite la «reapertura parcial en condiciones indispensables para garantizar la calidad sanitaria» y de aquellas piscinas que dispongan de un sistema de recirculación, así como también se procede al cierre total de duchas en equipamientos como piscinas y campos de deportes federados.
Desalinizadoras
Plaja también ha explicado que la comisión ha aprobado permitir las desalinizadoras en los diferentes sectores económicos --turístico, industrial y otros-- para hacer frente a la situación de sequía, y ha matizado que será así «siempre y cuando cumplan todos los requisitos de permisos y legales».
Esta decisión surge después de la propuesta de los hoteleros de Lloret de Mar (Barcelona) de comprar una desalinizadora para abastecerse, y Plaja ha recordado que estas instalaciones deben cumplir todos los requisitos porque «ocuparán espacio público, en algunos casos de titularidad municipal».
Ha recordado que el agua de las desalinizadoras privadas deberá ser utilizada con la «única finalidad de mantener la actividad económica y los puestos de trabajo de esta actividad», y ha señalado que el Govern aún no ha recibido ninguna propuesta en firme, pero que se estudiará cuando se produzca, y que tienen constancia de las demandas de algunos sectores.
Sobre un posible excedente de estas desalinizadoras, el secretario general de Acción Climática, Josep Vidal, ha dicho que no está previsto un excedente forzoso, pero que ve bien que si existe, y en caso de necesidad, «se pueda compartir con la comunidad del entorno», aunque insiste en que se debe hablar con los agentes económicos, y Plaja ha afirmado que estas conversaciones ya se están produciendo.
