El Gobierno francés destinará varias decenas de millones de euros en fondos de emergencias asignados a las autoridades locales para ayudar a los miles damnificados por las inundaciones, ha declarado el primer ministro francés, Manuel Valls, aunque sin aportar una cifra exacta.
Mientras busca medidas para frenar el rechazo a la reforma laboral y tras tocar fondo en la valoración de la ciudadanía gala, el presidente del país, François Hollande, y el Gobierno han prometido conceder una financiación adicional a las autoridades locales para hacer frente a las inundaciones, que se han cobrado la vida de cuatro personas.
"Debemos permanecer cautos y vigilantes. Llevará tiempo que el agua desaparezca", ha señalado Valls tras una reunión del Gobierno para tratar el asunto de las inundaciones, que han obligado a miles de personas a dejar sus hogares en París, han interrumpido el servicio de trenes y han obligado a los museos del Louvre y de Orsay a trasladar sus obras de arte a un lugar seguro.
Valls ha explicado que se pondrán a disposición decenas de millones de euros para los damnificados por las inundaciones, pero no ha dado una cifra precisa. El primer ministro ha señalado que las inundaciones han causado daños por valor de cientos de millones de euros. Se espera que las mayores ayudas se otorguen a los agricultores y a los empresarios.
Miles de personas se han visto afectadas en la región de Isla de Francia, que incluye la capital, París, por el desbordamiento del río Sena, que también ha provocado complicaciones en el servicio de transporte parisino.
Las autoridades han dicho que unas 4.000 personas han sido evacuadas en el departamento de Sena y Marne desde el inicio del temporal, el pasado domingo, según fuentes locales citadas por la emisora France Info. En total, desde que comenzaron las intensas lluvias en Francia el pasado fin de semana, unas 20.000 personas han tenido que ser evacuadas por los servicios de emergencia. Además, unos 24.000 hogares han sufrido cortes de electricidad.
Los niveles de agua registrados en París han descendido después del mes de mayo más lluvioso de la historia de Francia en los últimos cien años.
