ONU Medio Ambiente acaba de publicar una nueva guía para facilitar a tomadores de decisión y otros actores el análisis de los costos y beneficios de medidas de adaptación al cambio climático en ciudades de América Latina.
La región es una de las más urbanizadas del mundo, con aproximadamente 80% de la población viviendo en ciudades. Esto tiene implicaciones en el contexto del cambio climático. Por un lado, las ciudades son responsables de entre 60 y 80% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. Por el otro, se caracterizan por tener altos índices de pobreza y asentamientos humanos que ocupan de forma irregular el suelo y están situados en zonas no aptas para el desarrollo urbano. Ambos elementos agravan los impactos de los fenómenos naturales extremos.
El cambio climático tiene y tendrá repercusiones en las ciudades de la región, por lo que se justifica que los gobiernos destinen recursos económicos a medidas de adaptación, según se señala en la guía. Con las medidas adecuadas, se puede reducir la vulnerabilidad de la sociedad y los ecosistemas ante fenómenos meteorológicos extremos.
Sin embargo, para que las medidas tengan el mayor impacto posible, se requiere realizar evaluaciones cualitativas y cuantitativas para determinar cuáles son las idóneas para una ciudad concreta.
El informe Análisis costo-beneficio de medidas de adaptación al cambio climático en áreas urbanas de América Latina presenta de forma didáctica la forma en que se realiza este análisis basándose en los datos disponibles y explica casos de estudio que ilustran cómo es posible llevarlos a cabo y generar recomendaciones aún con información limitada.
En los casos de estudio de la guía, realizada en el marco del Programa EUROCLIMA financiado por la Unión Europea, se analizan las siguientes tres medidas de adaptación tomadas en la ciudad de Cartagena, Colombia: restauración de arrecifes, instalación de techos verdes y establecimiento de pavimentos permeables.