Más de 300 conexiones clandestinas de agua potable detectó y regularizo SEDAPAL en el 2014, a través de diversos operativos ejecutados en Lima y Callao. Dicha regularización permitió a la empresa recuperar aproximadamente 72 mil metros cúbicos de agua potable, cantidad equivalente a la que se utiliza para abastecer a más de 5 mil familias de zonas periféricas en un mes.
Estas violaciones cometidas a la red de abastecimiento de SEDAPAL, se consideran un delito y se castigan con pena privativa de la libertad, entre 4 a 6 años. El mayor número de incidencias se registró principalmente en los distritos de los conos norte y sur de Lima.
"Las conexiones clandestinas que en el verano se usan muchas veces para el llenado de piscinas portátiles, no sólo afectan a la empresa sino también perjudican la calidad del servicio que se brinda a los clientes, sobre todo a los que viven en zonas altas, debido a que el derroche de agua ocasiona que disminuya la presión del agua, afectando el suministro que debe llegar a las zonas de mayor complejidad geográfica", afirmó Elizabeth García, Gerente Comercial (e) de SEDAPAL.
Vandalización de grifos contra incendio
La especialista informó también, que la vandalización de hidrantes o grifos contra incendio, es otra forma por la cual personas inescrupulosas hurtan agua potable, sin considerar que ponen en riesgo la vida de personas en caso se produzca un incendio. "En todo Lima y Callao, contamos con más de 17 mil hidrantes, a los cuales se les hace periódicamente un mantenimiento preventivo para que se encuentren operativos en caso de alguna emergencia. Un 5% de ellos son vandalizados, lo cual es un atentado contra la seguridad", aseveró la representante de SEDAPAL.
SEDAPAL invoca a la población hacer uso racional del servicio de agua potable e informa que continuará realizando diversos operativos para detectar conexiones clandestinas en los diferentes distritos de la capital.