Izquierda Unida de Castilla-La Mancha ha acusado este miércoles a la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, de entrar en la negociación del Memorándum entre el Ministerio de Agricultura y las comunidades autónomas del Levante "para permitir que, por la puerta de atrás, con ocho enmiendas a la Ley de Estudio de Impacto Ambiental que se está tramitando en el Congreso, se modifiquen leyes de rango superior que dejan el Plan de Cuenca en papel mojado".
En un comunicado, IU ha destacado que la presidenta de Castilla-La Mancha "está utilizando el aumento de la reserva mínima en Entrepeñas y Buendía como cortina de humo, y no ha salido a explicar todas las consecuencias que van a tener estos cambio normativos, que afectarán al Plan Hidrológico Nacional, a las reglas de explotación del Trasvase y al sistema de funcionamiento de la comisión técnica que lo regula".
Con estos cambios legislativos, ha indicado la formación política, se quiere tener asegurado y mantener intacto el trasvase Tajo-Segura, a pesar de que en los últimos 30 años el río Tajo ha sufrido una reducción del 48 por ciento de las captaciones de agua en los embalses de cabecera.
Para el coordinador regional de IU, Daniel Martínez, "estos cambios normativos vienen a confirmar nuestros peores presentimientos, con respecto al Tajo, que se convierte de forma definitiva en afluente del Segura, sin importar cómo queda el resto de la cuenca".