La situación en la República Democrática del Congo ha sido clasificada como la peor emergencia posible en África durante las últimas décadas, con la gran mayoría de su infraestructura destruida por la guerra y falta de mantenimiento.
El objetivo de este proyecto es mejorar el acceso al agua potable, la higiene y el saneamiento en las comunidades rurales y semirurales de las zonas endémicas de cólera.