Redacción iAgua
Connecting Waterpeople
Amiblu
Likitech
AECID
Barmatec
TEDAGUA
ONGAWA
Asociación de Ciencias Ambientales
Schneider Electric
Vector Energy
ICEX España Exportación e Inversiones
ADASA
DATAKORUM
Cajamar Innova
J. Huesa Water Technology
Baseform
ESAMUR
IAPsolutions
Centro Nacional de Tecnología de Regadíos (CENTER)
EPG Salinas
KISTERS
Confederación Hidrográfica del Segura
Agencia Vasca del Agua
Rädlinger primus line GmbH
AGS Water Solutions
Lama Sistemas de Filtrado
RENOLIT ALKORPLAN
Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia
TRANSWATER
LACROIX
Fundación Botín
Sacyr Agua
AMPHOS 21
HRS Heat Exchangers
FENACORE
Xylem Water Solutions España
TecnoConverting
SCRATS
Idrica
Sivortex Sistemes Integrals
Hidroconta
Almar Water Solutions
ACCIONA
Grupo Mejoras
Ingeteam
Fundación Biodiversidad
s::can Iberia Sistemas de Medición
Filtralite
Saint Gobain PAM
Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico
Fundación CONAMA
Red Control
ISMedioambiente
FLOVAC
Minsait
Molecor
Innovyze, an Autodesk company
ADECAGUA
Global Omnium
Aqualia
Laboratorios Tecnológicos de Levante
GS Inima Environment
CAF
Hach
Catalan Water Partnership

Se encuentra usted aquí

El Supremo obliga a que las Confederaciones controlen los vertidos al alcantarillado

Sobre la Entidad

Redacción iAgua
Redacción de iAgua. La web líder en el sector del agua en España y Latinoamérica.

Las confederaciones hidrográficas serán responsables de la autorización de los vertidos industriales a los alcantarillados municipales, según se desprende de una sentencia del Tribunal Supremo que anula un artículo del reglamento de dominio público hidráulico de la Ley de Aguas. Hasta ahora, las confederaciones concedían los permisos para verter directamente a los cauces o aguas subterráneas, y los ayuntamientos las autorizaciones de industrias que canalizan sus aguas residuales al alcantarillado.

El recurso contra esta distribución de competencias lo presentó en 2004 la abogada María Jesús Acosta Pina en nombre del Ayuntamiento de Benifaió al considerar que la responsabilidad del permiso debe ser de las confederaciones, ya que estas aguas son vertidos indirectos a aguas superficiales que acaban en ríos. El Ministerio de Medio Ambiente impuso en 1998 al municipio una multa de 300.506 euros y una indemnización de 86.194 por no controlar unos vertidos contaminantes. Benifaió estaba pendiente de que el Gobierno construyera una depuradora para varios pueblos. El Supremo da la razón al Ayuntamiento. Acosta dice que el fallo es especialmente benefioso para pequeños municipios sin medios. La sentencia obligará a las confederaciones a una reorganización para asumir esta carga de trabajo.

Vía, El País.

La redacción recomienda