En Ecuador (17 millones de habitantes), existen casi cuatro millones de jóvenes de la “generación Y” o “millennial”, sin embargo, en la provincia del Azuay la cifra se incrementa pues uno de cada cuatro personas es “millennial” (INEC).
De acuerdo con los resultados de la “Encuesta Millenials” (Deloitte, 2018), los miembros de esta generación se encuentran en una búsqueda constante de su realización personal, y dentro de sus demandas está la de líderes que beneficien a la sociedad en su conjunto, así como les preocupa la sostenibilidad del ambiente.
En este contexto, las elecciones seccionales ecuatorianas del 24 de marzo de 2019 serán recordadas por sus resultados atípicos, así como por los errores en los pronósticos por parte de encuestadoras, asesores, opinólogos y maquinarias electorales.

En el caso de la provincia del Azuay, a más de las sorpresas, un elemento a destacar es el triunfo del activista indígena Yaku Pérez Guartambel para la Prefectura, así como la victoria del no en la consulta popular realizada en el cantón Girón (86,79% no están de acuerdo que se realicen actividades mineras en los páramos y fuentes de agua del Sistema Hidrológico Kimsacocha), procesos que tienen como elemento conector: la defensa de la naturaleza y el agua.

Pérez triunfa con el 29% de la votación a nivel provincia, sin embargo, su apoyo se incrementa en la zona urbana del cantón Cuenca (32%) donde un cuarto de los electores es “millenial”. La población del Azuay sintonizó con las ideas, la lucha, y el liderazgo que Yaku Pérez ha tenido en las últimas décadas al frente de organizaciones indígenas y campesinas para la gestión del agua.
Si desde la Presidencia de la República en Quito (Palacio de Carondelet) se busca entender qué sucedió en la provincia del Azuay, el mensaje es claro, la ciudadanía tiene un alto interés en la conservación ambiental y en la protección de sus fuentes de agua, por ello lo lógico es que este mensaje expresado a través de las urnas se escuche, se analice y se respete.
Cuestionar la voluntad de los electores o minimizar su contenido, terminaría por contradecir el compromiso de “diálogo” planteado por el presidente de la República, quien en más de una oportunidad ha señalado que escuchará siempre los mensajes de los ciudadanos a través de las urnas.