Uno de los términos claramente de moda hoy en día en el sector del agua a nivel mundial son los gemelos digitales. Al estar de moda, todo proveedor debe poder ofrecerte el suyo. Hemos llegado al punto que a cualquier plataforma se le llama gemelo digital, aunque solo sea una representación 3D o un repositorio de datos. Esto supone que el usuario final pierde la perspectiva de qué es un gemelo digital y cuáles son sus beneficios reales.
Hace ya tres años que desde el Smart Water Networks Forum (SWAN) se está trabajando para poner en valor los gemelos digitales. El SWAN Digital Twin Workgroup ha publicado este año Digital Twin readiness guide. El documento pretende ser una herramienta que ayude a las empresas del sector a entender qué son realmente los gemelos digitales y los beneficios que aporta implementarlos correctamente. También intenta facilitar que las empresas apliquen la tecnología, pues estas soluciones no son solo para grandes compañías. Al contrario, a menudo las pequeñas son las que pueden sacarle más provecho.
¿Pero qué es exactamente entonces un gemelo digital? Después de muchos debates, el grupo de trabajo del SWAN junto con el American Water Works Association (AWWA) Digital Twins Committee consiguieron llegar a una definición de consenso: “Un gemelo digital es una representación digital dinámica de un ente del mundo real y de sus comportamientos, basándose en modelos de datos estáticos y dinámicos, que permiten generar conocimiento e interacciones con él, para poder actuar sobre la realidad y conseguir funcionamientos mejorados”.
Sin duda, los gemelos digitales serán una de las herramientas básicas en la transformación digital de las empresas de agua
Aunque la definición puede parecer compleja, permite diferenciar claramente qué aporta un gemelo digital respecto a una simple representación digital, o los modelos clásicos. Un gemelo digital debe incluir una representación dinámica que siempre reproduzca a su gemelo real. Además, la definición nos permite clarificar para qué queremos un gemelo digital: obtener un funcionamiento mejorado. Esto se puede traducir en menor consumo de reactivos en los procesos de tratamiento, menor consumo de energía en bombeos, o una mayor calidad del agua. Cada empresa debe definir qué es lo que quiere conseguir.
Sin duda, los gemelos digitales serán una de las herramientas básicas en la transformación digital de las empresas de agua. Además, hay que destacar que precisamente en España hemos sido pioneros en aplicar esta tecnología. De los diez casos de uso de la guía del SWAN, dos son aplicaciones españolas: el gemelo digital del Área Metropolitana de Valencia, desarrollado por GoAigua, y el gemelo digital de optimización energética de la distribución del Consorci d’Aigües de Tarragona, basado en la tecnología de Suez. Ambos, claros ejemplos de la potencialidad de estas herramientas para mejorar la eficiencia en el funcionamiento del día a día.
Desde el Consorci d’Aigües de Tarragona lo tenemos claro. Nuestra experiencia con los gemelos digitales desde hace ocho años demuestra que no son una moda, sino una realidad. Si se aplican correctamente, permiten obtener mejoras difícilmente alcanzables con otras herramientas. Cuando implementamos el Sistema Avanzado de Operación con Optimización Energética del CAT (SAOOEC), no sabíamos que realmente estábamos implantando un gemelo digital. Este sistema aún elige cada día cuál es la forma más eficiente de distribuir el agua por toda la red, y envía de forma automática las órdenes a las bombas para que se pongan en marcha en el momento adecuado.
Pero no pensamos quedarnos aquí. En estos momentos, estamos en proceso de implantación de un gemelo digital de la tubería principal, que indique en tiempo real el estado estructural de cada uno de los tubos que la componen y pueda prever y anticiparse a situaciones críticas no deseables. Más adelante tenemos previsto incluir un gemelo digital de la planta potabilizadora y otro de la calidad del agua en la red. Las posibilidades son infinitas. ¿Os apuntáis?