Esta semana se ha abierto un interesante debate en los medios sobre el papel de los influencers y su forma de proceder. Este debate también ha tenido su pequeña repercusión entre miembros de nuestro sector.
Básicamente el debate se ha desatado por la coincidencia en muy poco tiempo de la denuncia de un par de establecimientos de reconocido prestigio, el hotel The White Moose Café, en Alemania y el restaurante Diverxo, del chef Dabiz Muñoz, en España. La controversia surge cuando dos influencers se dirigen a ambos establecimientos solicitando servicios gratis a cambio de hablar de ellos en sus redes. La respuesta de ambos establecimientos ha sido la misma. Resumiendo y siendo suave, les han dicho que no necesitan de su "influencia" y que no tengan tanta cara de solicitar servicios gratis. Aunque lo más importante es que han cambiado los papeles. Los propietarios de ambos negocios, que siguiendo el mismo criterio de los solicitantes (número de seguidores), también son influencers, han hecho públicas las solicitudes, influyendo negativamente en el prestigio de los influencers solicitantes, con lo que se ha creado el debate sobre el proceder de unos y otros.
¡¡VAYA LÍO DE INFLUENCIAS!!!
Esto me ha hecho pensar y me ha apetecido dar mi opinión a cerca de cómo veo que el papel de los influencers puede afectar al sector del agua. Por eso me he lanzado a escribir este artículo, para intentar contestar a esta pregunta:
¿Puede el sector del agua beneficiarse del uso del ´influencer marketing´?
Situación actual de los influencers
El término "influencer", cada vez es más conocido por el gran público, y sobre todo por la gente más joven, cuyo medio ambiente natural, es internet y las redes sociales.
Básicamente se trata de personas con influencia sobre un gran número de gente, y sus mensajes tienen gran calado entre sus seguidores. Hasta aquí nada nuevo. La diferencia viene determinada porque hasta hace poco, estas personas tenían esa categoría por la repercusión pública y social de sus actividades profesionales, predominando los sectores de gran consumo, como el espectáculo, el deporte y la política. Ahora esta categoría, aunque sigue teniendo una gran presencia de este tipo de personajes, ya no es exclusiva de ellos. Han aparecido otros personajes, que tienen influencia, y por tanto se consideran "influencers", únicamente por su actividad en el mundo virtual, blogs y redes sociales. Llegan a tener miles de "followers", sin que esto signifique que estos "influencers" sean profesionales del sector del que opinan y hablan.
Este campo, el de la influencia, prescripción o publicidad es muy lucrativo, por lo que resulta muy goloso para gente que quiere conseguir algo de prestigio social y unos beneficios económicos rápidos.
Para que nos hagamos una idea. Un "influencer" puede ganar en base a su número de seguidores y la red social en la que publique, porque no es lo mismo ser influencers en Twitter, que en Instagram, la siguientes cantidades de dinero según se publicó el año pasado en el diario ABC en su artículo, "Vale, ¿pero cuánto cobran los famosos por un «tuit»?".
Un «influencer» o famoso que tenga entre 3.000.000 y 7.000.000 de seguidores cobra:
- por un vídeo en Youtube 167.046 €
- por una foto en Instagram 66.800 €
- por un «tuit» 26.700 €
Un «influencer» o famoso que tenga entre 50.000 y 500.000 seguidores:
- por un vídeo en YouTube 2.500 €
- por una foto en Instagram 1.000 €
- por un «tuit» 400 €
En el primer grupo es donde se suelen englobar los personajes más famosos de la vida pública, como Rafa Nadal, Justin Bieber o Selena Gómez, aunque también hay famosos Youtbers como El Rubius. Este grupo está muy profesionalizado y gestiona estos temas a través de agencias y representantes que les mueven todo lo referente a derechos de imagen.
El problema surge, en determinados casos de influencers de menor entidad, que manejan los asuntos de gestión de imagen ellos mismos, sin conocimientos profesionales y con un cierto grado de inexperiencia y falta de tacto.
Aquí es donde surgen los "caradurer".
Influencers y caradurers
Con mi recién extrenado título, compartido con Ignasi Servia, de "Mejor influencer del 2017" de iAgua, y aunque no me dedique a ello, voy a dar mi modesto punto de vista sobre el asunto, que quiero basar en la experiencia que me da el "sentido común", un título que trato de ganarme cada día.
Si pretendes ser un "influencer" y vivir de ello considero que debes de tener una serie de principios:
Debes de ser objetivo y tener criterio propio sobre lo que hablas. Hablar bien de algo sólo por el simple hecho de que te paguen por ello, no dice nada bueno sobre tus criterios de opinión. Ya sé que en eso se basa el uso de personajes famosos en publicidad, pero considero que ser un influencer con pretensiones de prescriptor, debe de ir más allá de simplemente prestar su imagen.
Si quieres cerrar una acuerdo comercial, porque hacer algo a cambio de una contraprestación de bienes materiales (dinero, cosas o servicios), es eso, "un acuerdo comercial", deberás hacer una oferta y basarla en resultados. Basarla sólo en el número de seguidores es muy vago y poco profesional. ¿Quienes son tus seguidores? Podrían ser ficticios, o no tener nada que ver son el "cliente tipo" del negocio con el que pretendes cerrar el trato.
Debes de convencer a tu cliente potencial, porque eso es lo que será si consigues cerrar el trato, tu cliente. Demuéstrale que un acuerdo contigo tendrá frutos. Enséñale con datos objetivos y demostrables tu experiencia y resultados anteriores en otros acuerdos. Un simple, "ya lo hice con Pepito y fue muy bien" o "si haces lo que te digo nos irá muy bien a los dos", sólo demuestra una total falta de profesionalidad y da la sensación de que no tienes ni idea de lo que haces.
Cuando hagas tu oferta sería más conveniente que le pongas un valor económico a tu oferta. Los profesionales suelen cobrar de esa forma, y sólo como último recurso podrías plantear la posibilidad de en lugar de que el pago te lo hagan con dinero, te lo hagan con bienes o servicios, pero siempre teniendo en cuenta cual es el valor de tu trabajo.
Por último ten en cuenta, y aquí vuelve a tener una gran importancia el valor económico del trabajo, que debes de tributar y pagar impuestos por lo que cobres, tanto sea en dinero, como en bienes o servicios. Incluso si consideras que es un regalo por "lo bien que lo haces", debes de declararlo y pagar los correspondientes impuestos a su valor.
Lo de las comidas, habitaciones... gratis, sólo lo entiendo cuando por la realización de tu trabajo, el cliente ha quedado muy contento y quiere, por iniciativa propia, hacerte ese regalo. Pero ojo, que si el regalo es importante, tienes que seguir declarándolo y pagando los impuestos correspondientes. Esto lo podrá explicar muy bien Victor Brun, que prácticamente se arruinó por el "regalo" que recibió al tocarle una cesta de navidad de 160.000 € y olvidar pagar los correspondientes impuestos.
Por todos estos principios, y desde mi punto de vista, y a riesgo de recibir todas las críticas del mundo de este tipo de personas y sus defensores, considero que quien funciona sin respectar estos principios, más que un "influencer" es un "caradurer" y se hartarán de él.
Influencers y el Sector del Agua
Después de todas estas disertaciones sobre lo que considero que es, o no, un influencer, voy a dar mi punto de vista sobre cómo puede encajar esta figura en el sector del agua.
El mundo del agua no es ajeno a la transformación general que estamos viviendo en la comunicación. Además desde hace unos años viene desarrollando un proceso de apertura hacia el exterior, tratando de dar a conocer al resto de la sociedad su importancia y necesidades
En este proceso de apertura se van incorporando técnicas que en otros sectores ya están implantadas. A mi parecer, este es el camino que también van a seguir los influencers. La incorporación del "influencer marketing" a los procesos de divulgación deberá ponerse en práctica por los distintos actores del sector del agua: empresas gestoras; administraciones; ONGs; medios de comunicación especializados; proveedores; distribuidores; comunidades de regantes; asociaciones...
Hasta ahora el papel de los influencers en el sector del agua ha sido prácticamente nulo. A continuación me gustaría exponer algunas ideas de por donde podrían ir las tendencias y cómo podría ser útil el influencer marketing al sector del agua:
- Dar a conocer un producto
Este es el planteamiento clásico de prescriptor. Lo importante tanto para el influencer como para la marca, es que el comentario sea cierto y objetivo. Es decir, no digamos que es bueno, algo que no lo es, por mucho dinero que nos ofrezcan. Nos estamos jugando el prestigio de la opinión (del influencer) y del producto (de la marca).
Un ejemplo, si una empresa va a lanzar un producto de mejora de la eficiencia de los sistemas de riego, yo no lo dudaría ni un momento, trataría de que Ignasi Serviá diera su opinión sobre el producto.
- Lanzar una campaña (ahorro de agua; concienciación; difusión de marca...)
Si queremos lanzar una campaña de cualquier tipo, por una empresa, administración, ONG, o cualquier otra entidad, la figura del influencer puede ser clave.
Se me ocurre por ejemplo la reciente campaña del Mapama, "Internet no se acaba, el agua sí". Estoy convencido de que en este caso la figura de un gran influencer generalista, tipo El Rubius, o Rafa Nadal, podría hacer llegar el mensaje a mucha más gente.
Otro ejemplo sería la campaña que lanzó ONGAWA sobre el acceso universal al saneamiento #AsíNoLlegamos en la que tuve el placer de colaborar.
- Difusión de contenidos
Si soy una entidad o profesional del sector, estaré muy interesado en que algún influencer se haga eco de mis contenidos, tanto para hablar de mis productos o servicios, como para hacer crecer mi imagen de marca.
Este aspecto cobra especial relevancia en aquellas entidades que se dedican a la difusión especializada de contenidos relacionados con el sector del agua, como medios de comunicación, plataformas digitales, fundaciones...
Todos sabemos que no es lo mismo que un artículo que hemos escrito lo tuiete una persona, u otra. Este es uno de los efectos de los influencers que también se puede profesionalizar.
- Formación de personal
Esta es una idea que apuntó Jorge Castañeda, hace justo un año en su post "Imaginando el papel futuro de la #Waterpeople en la comunicación del sector del agua en España". Es una idea muy interesante y que me gustó mucho, ya que una de las tendencias en comunicación, es conseguir que los trabajadores o miembros de una entidad sean sus propios prescriptores. En esta estrategia el poder contar con alguien que forme y apoye en el diseño de las líneas de trabajo de las plantillas, puede marcar grandes diferencias.
- Diseño de estrategias de una entidad
En momentos puntuales contratar los servicios de un influencer, para el asesoramiento de una campaña, puede ser de gran interés, si además luego se quiere contar con su apoyo en la difusión.
- Aumento del prestigio de una marca por sus influencers
Este es un aspecto poco explorado, pero que creo que puede ser muy interesante. Las entidades las forman las personas, y en gran parte el prestigio de las entidades se consigue por sus propios logros y por el prestigio de las personas que la forman.
Es un poco eso del dicho tan español del "...y tú de quien eres". Si una entidad quiere destacar en algún aspecto concreto, por ejemplo, en ser el referente en las políticas de promoción del consumo de #Aguadegrifo, puede ser muy interesante tener entre sus filas a Luis Martín o Alberto Vizcaíno.
O si una entidad quiere ser referente en políticas de concienciación y prácticas de sostenibilidad, puede ser muy interesante tener entre sus filas a Roberto Ruiz Robles.
Este es un valor que hasta ahora, a mi parecer, no se está teniendo en cuenta como valor de los influencers, ni en las políticas de reclutamiento de entidades, pero que puede cobrar una gran importancia en un futuro que ya está aquí.
- Influencia de iAgua y sus rankings
Por último hay un aspecto que no quiero dejar de comentar, y es el efecto que iAgua y sus brillantes "ocurrencias" tienen en la evolución de la comunicación dentro del sector, y desde el sector hacia fuera.
Hemos visto la creación de sus Premios iAgua, que cada vez tienen más relevancia. Y en estas dinámicas el papel de los influencers cada vez es más importante. Al comienzo del año pasado lanzaron sus alianzas, y al final del año nos sorprendieron con la creación de un premio específico a Mejor Influencer. Este año hemos comenzado con otra sorpresa, la verificación de blogueros. Ya veremos en lo que acaba. Al paso que van, tiene pinta de que vamos camino de una nueva red social especializada en el agua, y aquí seguro que los influencers tendrán un papel más que destacado.
Por último, los estudios que van apareciendo indican que la importancia de los influencers en la toma de decisiones de la sociedad es cada vez mayor. Más concretamente la de los microinfluencers, por su capacidad de "engagement" en sectores concretos. Este tipo de planteamientos deberían ir tomándose más en serio y entrar dentro de las agendas de las entidades que quieran comunicar algo dentro del sector del agua. Por supuesto cualquier planteamiento deberá hacerse desde la profesionalidad y huyendo de las simplistas propuestas de los "caradurer", en la línea de "si me invitas, hablo bien de ti". Seamos profesionales... lo cual no quita que si alguien da un resultado con el que estás muy satisfecho, no puedas tener una atención con él.
Ejemplo práctico
Como punto final voy a exponer un ejemplo práctico que he puesto en marcha al mismo tiempo que iniciaba este artículo.
El domingo 28/01/18 a primera hora de la mañana busqué un artículo que me gustase y cumpliese unos parámetros de calidad y condiciones determinadas. Contenido interesante, conciso, bien explicado, concreto y bien documentado. Me encontré con el artículo de Jordi Oliveras, “Thames Tideway Tunnel, el proyecto de saneamiento para el Londres del s. XXII”, que como es habitual en todas sus publicaciones cumplía perfectamente y más, con todas estas condiciones.
Con este material me propuse comprobar el título recién adquirido de Mejor Influencer del 2017, y lancé a mis redes (Twitter, Facebook y Linkedin) la información, con la idea que divulgar el artículo y conseguir su difusión. Bueno, pues aquí están los resultados.
Datos de partida:
Fecha de publicación del artículo: 23/01/2018
Fecha de inicio de la prueba: 28/01/2018 a las 11:00
Difusión lograda hasta ese momento en 5 días desde su publicación:
Shares: 16
iAgua Likes: 5
Datos de finalización:
Fecha de finalización de la prueba: 29/01/2018 a las 09:00
Difusión lograda hasta ese momento, 22 horas después:
Visualizaciones: 1.022 Se logra un incremento de 591 visualizaciones, un 137%
Shares: 294 Se logra un incremento de 278 shares, un 1.737%
iAgua Likes: 8 Se logra un incremento de 3 likes, un 60%
Impacto en redes:
* Los datos de Facebook no los muestro ya que es muy complicado agregarlos sin las herramientas adecuadas.
Twitter:
22.480 Impresiones orgánicas; 230 Clics en el enlace al artículo; 218 likes y 141 Retweets
Linkedin:
4.240 visualizaciones y 61 Shares
Una vez mostrados los resultados que cada uno saque sus conclusiones.
Así que piensa en tu próxima estrategia de comunicación en el sector del agua y "Pon un ´influencer´ en tu vida"
Gracias por haber dedicado unos minutos a leer este post y gracias también anticipadas por compartir tus reflexiones.
Si te ha gustado o al menos entretenido, no te olvides de compartirlo en tus redes sociales (virtuales o presenciales) y de dar un like en el corazón de arriba. Ojo, antes de clickar el corazón debes de entrar o registrarte en iAgua.
Hasta la próxima.
