Pregunta: Digitalización y transformación digital. Yo creo que, en el mundo del agua en España, debemos hacer una gran inversión, primero, en digitalización.
Respuesta: Ahora mismo tenemos una oportunidad a través del PERTE de digitalización en donde se podría invertir mucho dinero en ese esquema. El concepto de digitalización para un ciudadano normal, incluso para un experto en agua, incluye todos los elementos, no solo es medir, comunicaciones, modelos matemáticos, plataformas, etc., es la conjunción de todo. Es una nueva cultura del trabajo. No todas las empresas y entidades tienen el mismo grado de desarrollo en estas materias.
El sector del agua está muy bien preparado por una cuestión: históricamente tenemos infraestructura distribuida por todo el territorio y se han instalado dispositivos de medición a lo largo de los años. Dispositivos que no son los de ahora, obviamente, pero que funcionaban y nos daban información, es decir, disponemos de datos históricos muy relevantes.
En cualquier caso, queda mucho camino por recorrer en este tema. Nos nubla un poco las necesidades de inversión que tenemos en lo básico, es decir, en las tuberías y en las infraestructuras que tienen muchos años. Tendríamos que revisar la parte material y civil de las obras.
P.- Tú te refieres a que, “el dinero de los PERTES”, a lo mejor deberíamos destinarlo a mejorar las infraestructuras.
R.- Eso lo creemos todos en el sector, sin embargo, hay que entender las reglas del juego. Europa nos da dinero para temas punteros que puedan generar una cierta transformación, tanto laboral, como de conocimiento y de diagnóstico. La oportunidad es: Europa da dinero para eso, entonces, lo tenemos que emplear.
Tenemos que seguir insistiendo y, por supuesto, esto tiene que llegar a la ciudadanía.
P.- Hombre, Fernando, yo creo que me lees el pensamiento: hay un gran desconocimiento del mundo del agua, de las infraestructuras, de lo que cuesta llevar el agua a las casas, por parte de la gente de a pie.
R.- Lo hay. Cuando se habla del agua, la imagen inicial que tiene la gente es la del agua potable que viene del grifo y se olvidan del saneamiento que es, en coste, mayor que la primera aunque no se manifieste en la tarifa.
P.- Al hilo de esto: yo creo que hay poca formación específica destinada al sector del agua.
R.- Hay bastante oferta en el mercado de profesionales universitarios, pero poco estructurada, y una escasísima oferta para formarse como Capataz u Oficial. El problema es que el sector es muy “cortito”. El agua urbana solo representa el 0,6% del P.I.B.
El montaje de cursos tiene el condicionante de que son muy específicos, para poca gente y poco reiterativos porque el sector no da para que haya alumnos todos los años, con lo cual, se forman en técnicas transversales, como el mantenimiento, la digitalización, etc., y luego, en la empresa, se especializan en el sector del agua. Tenemos un cierto déficit, sí.
Eduardo: ¿Qué tal vas?
Fernando: Bien, me estás sometiendo a una tortura, pero bueno.
Eduardo: jajaja
P.- Hidrógeno verde ¿Cómo vamos de producción en España?
R.- Fernando: parece que mal, ¿no?
Eduardo: yo creo que sí.
Es un campo más energético, en el que, el agua es fundamental. Como sector, ahora mismo, tenemos que estar atentos, participar, conocer y colaborar en los pilotos, sin embargo, no es nuestra actividad principal.
Hay temas que están más cercanos a nuestra actividad orientados a la economía circular, por ejemplo, el biogás de digestión. Debemos tener más capacidad de impulsarlo, mejorarlo y desplegarlo, para lo cual, en el sector, tenemos que empezar a pensar en cambiar la depuración, es decir, aplicar sistemas anaeróbicos donde la materia orgánica también la disocias o la oxidas, obteniendo biogás de digestión. Esto no es sencillo, “hay que hacer” mucha innovación.
P.- En esto se está avanzando.
R.- Se avanza. Nosotros somos un sector puntero con muchos años de experiencia. Administrativamente, ahora, se están poniendo los primeros cimientos que consisten en fomentar su producción a través del mecanismo de bonos verdes, o sea, garantías de origen, es decir, que la elaboración del producto renovable esté primada. Queremos fomentar este tema, con lo que, los primeros actores deben estar motivados, ilusionados.
Empieza a no tener sentido que las depuradoras sean grandes consumidores de energía.
La humanidad se tiene que plantear que no podemos gastar energía en depurar las aguas residuales, sino más bien, utilizar sistemas que produzcan un poquito, aunque sea un poquito, por lo menos que sean autosuficientes.
Continuará...