La empresa que sobreviva a esta pandemia habrá aprendido una lección importante: el futuro empresarial pasa por vender servicios digitales y no equipos.
La digitalización de las empresas donde se ofrezcan soluciones de controles inteligentes de los equipos para optimizar en tiempo real las labores de operación y mantenimiento para aumentar la eficiencia automatizada en las instalaciones, conseguirá sobrevivir a un futuro que se presenta incierto.
La digitalización significa también poner al alcance del cliente la posibilidad de la adquisición directa de un producto a través de Plataformas Digitales. La especialización de las Compañías en soluciones técnicas para el desarrollo de equipos de ingeniería y la selección de equipos standard, seguirán siendo las señas de identidad de aquellas empresas que impulsen el salto al mundo digital. Así, el desarrollo de unidades modulares y compactas que permitan el control absoluto de una instalación de manera telemática (para accionar los mecanismos de lo que se necesita en el momento que sea y donde se estime oportuno) será clave.
Esta pandemia nos ha enseñado que la parte que nunca podrá derribar será la digitalización y su aplicación
Además, la digitalización permite la transmisión de los conocimientos de la tecnología aplicada a un servicio y comunicarlo de manera efectiva a una instalación para su desarrollo. Esto significa que el diseño original está vivo evitando su envejecimiento al renovar los procesos que transcurren dentro de la instalación. También permite la aplicación de las técnicas de servicios para solucionar los problemas que pudieran surgir al anticiparse a los mismos por medio de detectar las primeras señales de una posible anomalía en los sistemas. Y, como ingrediente final, la transmisión de dichos datos para establecer el comportamiento de una instalación para determinar una mejora continua.
Tampoco hay que olvidar que la digitalización y la innovación alargan la vida útil de las instalaciones y de los equipos integradas en ellas. Supone un futuro esperanzador para las empresas ante un panorama incierto. La manufactura de los equipos a demanda directa del cliente ya no será un proceso estructuralmente vital y del cual depender.
el futuro empresarial pasa por vender servicios digitales y no equipos
Esta pandemia nos ha enseñado que la parte que nunca podrá derribar será la digitalización y su aplicación. Los pilares sobre los que se basa permiten un desarrollo espectacular en todo lo que nos rodea. Desde la implementación tecnológica pasando por el desarrollo de herramientas digitales. Los recursos digitales son infinitos ya que son tecnológicos y siempre pueden aplicarse para optimizar los procesos de trabajo: comenzando por automatizaciones, desarrollando en innovación, integrando los equipos humanos en la gestión comercial y en el tiempo hasta llegar a su optimización total.
Contra esto, cualquier pandemia sea de la naturaleza que sea, no puede "postular" en su propio beneficio.
