A pesar de que no tenga mucho que ver con lo solemos publicar, creo que, aunque solo sea por su historia y la nostalgia, merece la pena dedicarle unas palabras, y es que esta semana, de nuevo, la Fontana di Trevi a vuelto a tener agua.
Gracias a un benefactor privado, más concretamente una marca de moda italiana, ha sido posible el lavado de cara de la fuente más visitada de Italia. Así que ya podemos visitar Roma, y tirar unas monedas en la Fontana di Trevi para pedir los deseos que esperemos se nos cumplan.
Así pues sólo queda dar la enhorabuena a los italianos, por recuperar la belleza del agua recorriendo el mármol con el que Nicola Salvi esculpió las esculturas que componen esta obra de arte, hecha a base de mármol, agua y juegos de luces, que deja soñar a todos los que lanzamos una moneda al agua de los deseos.