Ayer se celebró en el Castell de fraga las jornadas agrarias de 2022 organizadas por Ayuntamiento de Fraga y merco Fraga. Su director, José Ignacio Gramun me invitó y me pude combinar la agenda para asistir a dichas jornadas. En ellas se abordaron tres temas de actualidad y su relación con la fruticultura de la comarca, pero que también afectan a otras zonas productoras del estado. Los ponentes fueron.
- Impacto del cambio climático (Antonio Ruiz de Elvira, Catedrático de Física Aplicada de la Universidad de Alcalá).
- Seguro Agrario (Juan Cruzan, director de Agroseguro en Aragón).
- Repercusión del conflicto bélico Rusia-Ucrania y consecuencias en el sector agrícola y Ganadero (Gabriel Trenzado, director de relaciones internacionales de Cooperativas Agroalimentarias de España).
Antonio Ruiz presentó diferentes evidencias sobre el cambio climático, recomendando que la mejor opción es reconocer la realidad para tomar medidas de adaptación y mitigación de los efectos del cambio climático. El clima siempre ha cambiado, pero ahora los cambios son cada vez más intensos y rápidos.

Compartió que el incremento de concentración de CO2 atmosférico no para de crecer, a pesar del Covid o las reuniones multilaterales, y que presenta una estacionalidad debida principalmente a que en el hemisferio norte se concentra casi toda la tierra.
El problema es que aumenta la temperatura de la tierra, pero sobre todo la temperatura del polo Norte, porque esto incrementa la probabilidad de que nos llegue aire de Groenlandia (frío) y a los pocos días del Sahara (caliente).

Recomendó adaptarse a los extremos climáticos porque estos cada vez serán más frecuentes: heladas una vez al año, inundaciones debido a nevadas importantes seguidas de incrementos importantes de temperaturas o en el levante, olas de calor, etc..
Por su parte Gabriel Trenzado repaso algunas de las repercusiones del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, pero puso de manifiesto que los principales problemas ya los teníamos antes de la guerra.

He querido dejar para el final la presentación que realizó Juan Cruzan, responsable de Agroseguro en Aragón. Reconoció que la helada del pasado fin de semana ha sido el siniestro puntual más grave que se ha vivido en Aragón, y uno de los más graves a nivel nacional porque se han visto afectadas zonas de Aragón, Catalunya, Castilla e incluso Granada. Esta jornada estaba planificada desde hacía unos días, pero la proximidad a la fecha del siniestro provocó un intenso debate.
Cruzan ha realizado una presentación en la que ha aportado muchos datos tanto a nivel nacional, como de Aragón. Aquí recojo las principales ideas que ha compartido. Ha iniciado su presentación explicando que debido al cambio climático los siniestros son cada vez más frecuentes, intensos, agresivos y en periodos más largos del año. Las lluvias torrenciales no tienen fecha, y luego no llueve.

En el COP 26 se presentó que el sector de la agricultura es el sector más vulnerable al cambio climático, con un 34% de empresas vulnerables. En los últimos años estos efectos se han incrementado, pasando la siniestralidad del 92,2% en 2001-2010 al 110,7% en la serie 2011 – 2021. De poco sirven las medias, tenemos que empezar a mirar tendencias. Como yo digo, tenemos que pasar de gestionar “la normalidad a gestionar extremos”.



Como se puede ver en la gráfica el número de siniestro debidos al clima, y estos la mayoría relacionados con el agua, es muy variado (helada, lluvia, inundaciones, pedrisco). En Aragón el año pasado las heladas supusieron un 48,5 % con 6.308 ha.

Ayer jueves, Teresa Jordà, consejera de Acción climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Catalunya, realizó una visita a plantaciones afectadas próximas a Lleida. Compartió este tweet.
“En Corbins conociendo de primera mano las consecuencias de una de las peores heladas de los últimos años en los campos de fruta dulce. Estamos acabando de evaluar la afectación global, y el @govern apoyará a nuestros agricultores.
¡Tenemos que garantizar que no se deje de cultivar ni un palmo de tierra!”
El sindicato Unió de Pagesos ha estimado unas pérdidas de 450 millones de euros de fruta dulce y 28 millones de euros en frutos secos en Lleida, mientras que agroseguro estima unas indemnizaciones de 59 M€.

Ahora acabaré con algunas de las ideas que han aparecido en la parte final de la presentación y el debate.
- La ley de seguro agrario es la primera ley de consenso de todos los partidos al inicio de la democracia.
- Algunos agricultores se han quejado de la reducción de la producción asegurada, de la que han sido informados hace unos días.
- A esta idea, Cruzan ha contestado que lo ordinario/habitual no se puede asegurar, y que el seguro está para hacer frente a aquellas situaciones extraordinarias. Por esta razón si tienes varios siniestros, el potencial productivo de tu parcela se reduce. Si el 30 % de los años hiela, tu parcela pasa a tener una producción potencial del 70% de la producción.
- No se debe realizar seguros con rendimientos inferiores, porque esto altera las producciones medías de las parcelas.
- Hay margen de mejora para aumentar las coberturas en caso de heladas.
- El procedimiento para la peritación de daños se realizará en 2 fases: inspección inmediata, y tasación definitiva.
- La media de pago de indemnizaciones se situó en 2021 en 29,8 días para todas las líneas de agro seguro.
- Se debe buscar una sostenibilidad del sistema de los seguros agrarios. Actualmente por cada 1 € que paga el agricultor en seguros, reciben 1,45 €.
- No se debe confundir seguros con ayudas al sector.
En las inundaciones causadas por el Gloria en Catalunya el Departament de Agricultura de la Generalitat de Catalunya compartió la cartografía de las parcelas que fueron afectadas. Esta es la única vez que he visto cartografiado un siniestro. Nos estamos jugando mucho como sociedad, y pienso que debería empezar a haber datos abiertos de los siniestros para que los agricultores tengan instrumentos/datos para tomar las mejores decisiones relacionadas con el cambio climático.
Como se ha visto los efectos del cambio climático están incrementando la siniestralidad de diferentes formas, y esto provoca una reducción de la producción asegurada, que se traduce en una reducción de la renta de los agricultores en caso de siniestro.
Yo entiendo que se deba buscar una sostenibilidad económica en los seguros agrarios, pero por la misma regla de 3, se debe buscar una sostenibilidad económica en la producción de alimentos. Si la capacidad de producir alimentos se reduce al 70% debido a que el cambio climático provoca que los siniestros extraordinarios se vuelvan vuelto ordinarios, debería haber un “instrumento” que permita al agricultor compensar está perdida de renta.
Si no se mantienen las rentas del sector primario se perderán agricultores, pero también se perderán productores de alimentos, población de zonas rurales, gestores del territorio, motores de la economía, etc… y esto nos afecta a todos.