FACUA ha presentado, como en los años anteriores su estudio de las tarifas del agua en 28 ciudades españolas en el año 2015. Entre sus conclusiones destacan:
- El análisis de FACUA toma como referencia una vivienda con tres habitantes y un consumo mensual de 10 metros cúbicos. Ha constatado diferencias entre ciudades de hasta el 349,4%. Las variaciones alcanzan los 453,60 euros al año para una vivienda con un consumo de 10 metros cúbicos mensuales y un calibre de contador de 15mm. Los precios comparados incluyen los cánones y recargos que se aplican en muchas ciudades pero no cuentan las tarifas por alquiler y mantenimiento de contadores ni el IVA.
- Para un consumo de 10 m3 con un contador de 15 mm, los precios más caros mensuales son los que se abonan en Alicante, con un importe de 48,62 euros, donde menos del 1% de la población tienen instalados contadores de 15mm, Murcia 29,35 euros y Huelva (24,24 euros), en los tres casos gestionadas por empresas mixtas.
- FACUA ve necesario que los ayuntamientos y entidades gestoras den participación a las asociaciones de consumidores a la hora de diseñar las tarifas y aprobarlas.
- FACUA continúa demandando una norma marco que regule aspectos básicos del servicio; estructuras tarifarias, procedimientos de aprobación, condiciones del servicio, reclamaciones, contratación y participación.
Hasta aquí algunas de las consideraciones de FACUA.
Profundicemos un poco más. La gráfica de portada recoge los datos para 10 metros cúbicos mensuales y un calibre de contador de 15mm, en donde junto con el precio (en céntimos de € por metros cúbico) se han incluido las poblaciones de las diferentes ciudades.
Partamos de una realidad contrastada: Los costes asociados a un servicio de ciclo integral del agua (CIA) son muy sensibles al tamaño de la población. Es decir, cuánto más pequeña es la población mayores son los costes incurridos en un gobernanza profesional y competente del servicio del CIA.
El grafico habla por sí solo. Resalto algunos aspectos:
1) Es obvio que algunas de las tarifas analizadas no incluyen TODOS los costes que, razonablemente, deberían de estar asociados e incluidos en este servicio.
2) Realizar cualquier conclusión, a partir de los datos disponibles, no es consistente ni permite establecer comparativas sostenibles ni técnica ni económicamente
3) Existen incongruencias patentes:
- Alicante y Murcia (que se nutren de forma esporádica de agua de mar desalada) tienen unas tarifas superiores a las islas que se nutren, en un gran porcentaje de agua de agua de mar desalada.
- Ciudades con mayor pluviometría (A Coruña y Bilbao) tienen tarifas superiores a ciudades con menor pluviometría (Valladolid, Salamanca, Zaragoza)
- Madrid con más de tres millones de habitantes, tiene tarifas superiores a Valladolid con la decima parte de población.
4) Urge disponer de un consenso sobre los costes que deben de incluirse en las tarifas (en blog anteriores ya expuse mis creencias sobre los costes que deberían de cubrir las tarifas de un servicio de CIA)
Cada vez que se publican datos sobre tarifas de municipios me ratifico en mí creencia de la necesidad de establecer una tarifa única para todo el territorio nacional. Fijada por un organismo lo más alejado posible, desde el punto de vista administrativo, de la administración local. Eso sí, estoy de acuerdo con FACUA en que deben de participar, en el establecimiento de esa tarifa única, las asociaciones de consumidores: Transparencia por encima de todo y como principio fundamental.
Si el agua es un bien público, sigo sin entender a los que defienden que, donde más llueve, deberían de tener unas tarifas del servicio del CIA más barata. Por esa misma razón, ¿los que viven cerca de una central eléctrica deberían de tener la electricidad más barata?
Sería interesante realizar un estudio similar para aglomeraciones de menos de 20.000 habitantes, donde la casuística es mucho más compleja y donde los problemas esbozados en este blog se agudizan.
