No hay mucho que añadir a las imágenes que hablan por si solas. Se trata de la salida de los cuatro aliviaderos del Embalse de Ordunte a pleno rendimiento.Son aliviaderos de labio fijo, por lo que no hay margen alguno para regular el desembalse por esta vía. Una muestra del excedente de caudal que hemos tenido este invierno.
Agua que vertemos al río Ordunte, aguas abajo y que alimenta al Cadagua y que acabará desembocando en el mar Cantábrico a la altura de El Abra de la Ría de Bilbao.