Redacción iAgua
Connecting Waterpeople
ESAMUR
Confederación Hidrográfica del Segura
Sacyr Agua
ISMedioambiente
IAPsolutions
DATAKORUM
TecnoConverting
Xylem Water Solutions España
Grupo Mejoras
Schneider Electric
ADASA
EPG Salinas
FLOVAC
Lama Sistemas de Filtrado
RENOLIT ALKORPLAN
Cajamar Innova
Fundación CONAMA
Idrica
Centro Nacional de Tecnología de Regadíos (CENTER)
HRS Heat Exchangers
Red Control
Hach
SCRATS
Saint Gobain PAM
Minsait
Hidroconta
Sivortex Sistemes Integrals
Barmatec
J. Huesa Water Technology
Vector Energy
Ingeteam
Innovyze, an Autodesk company
GS Inima Environment
ICEX España Exportación e Inversiones
Almar Water Solutions
ADECAGUA
AMPHOS 21
AECID
CAF
TEDAGUA
Global Omnium
Baseform
AGS Water Solutions
Catalan Water Partnership
TRANSWATER
Agencia Vasca del Agua
Amiblu
KISTERS
Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia
Fundación Biodiversidad
LACROIX
Likitech
ONGAWA
Laboratorios Tecnológicos de Levante
Rädlinger primus line GmbH
s::can Iberia Sistemas de Medición
Molecor
FENACORE
Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico
Asociación de Ciencias Ambientales
Aqualia
Filtralite
Fundación Botín
ACCIONA

Se encuentra usted aquí

Biofouling. Una visión general

Sobre el blog

Jose Luis Soler Martinez
Empresario. Director General de Imabe do Brasil Ltda. , Fundador de Grupo Oceánica Maroc, Turalter, Srl. , Technoymar Soluciones, S.L. y Ecowater Technologies, S.L. Ecowater Innova/Zequanox en Europa y América Latina
  • Biofouling. visión general

Algunas de las numerosas especies que pueblan los océanos nadan o son llevadas por las corrientes, pero muchas tienen que encontrar una superficie dura para fijarse con el fin de cumplir sus ciclos de vida. La escasez de sustratos duros naturales en el medio marino trae como consecuencia que cada espacio disponible sea disputado y cubierto por una variedad de cirripedios, algas, bacterias, etc.

Un breve repaso histórico

Desde tiempo inmemorial el hombre tuvo necesidad de proteger las partes sumergidas, de las embarcaciones frente a las incrustaciones. No es cosa nueva. Ya Homero hace alusión al fenómeno de las incrustaciones en las navis lunga “galeras” de los micenos (1300-1100 AC). Estos ya aplicaban protección a base de pez o minio.

En el año 412 a.C. se comenzaron a usar mezclas con alquitrán, azufre y arsénico para proteger los barcos de madera del ataque de gusanos tubícolas. En la Edad Antigua los griegos y romanos utilizaron con éxito placas metálicas.

Las carabelas utilizadas por Colón estaban protegidas con sebo y alquitrán y las embarcaciones de Vasco da Gama con carbón; siglos después, en Inglaterra se siguió utilizando este método.

La primera patente “antifouling” fue concedida a William Beale en 1625 en Inglaterra; la pintura para evitar la fijación de los gusanos tubícolas estaba basada en polvo de hierro, cemento y probablemente compuestos de cobre.

En 1851, en Alemania, los barcos de hierro comenzaron a protegerse con barnices oleosos. Posteriormente, el uso de sistemas de pinturas solubles en benceno posibilitó una combinación más efectiva y barata de resinas, manteniéndose su utilización hasta el presente.

En el primer cuarto del siglo XX, las investigaciones sobre pinturas “antifouling” comenzaron a complementarse con investigaciones biológicas; los avances en zoología y botánica proveyeron descripciones de la forma, ciclos de vida y comportamiento de muchos grupos de organismos bioincrustantes.

Durante este proceso, han sido utilizados óxido de cinc, arseniatos, compuestos de tributil y trifenil estaño y diferentes extendedores. Muchas de estas sustancias están hoy excluidas desde el punto de vista ecológico.

La formación del "biofouling"

El proceso del "fouling" biológico comienza en el instante en que un sustrato duro se sumerge en un medio líquido con organismos. En anteriores artículos ya expuse las características y proceso de este fenómeno.

El carácter de la comunidad resultante es determinado por la naturaleza del sustrato, la disponibilidad y diversidad de los colonizadores, la eficiencia de su fijación al sustrato y los eventos bióticos/abióticos (a menudo directamente el hombre) que ocurren durante y después de la fijación.

Influencia de los factores abióticos

Parámetros tales como temperatura, salinidad, pH, oxígeno disuelto, luz y tipo de sustrato juegan un importante papel en la determinación de la composición, desarrollo y sucesión de la comunidad incrustante.

  • Temperatura: Ejerce un gran control sobre la distribución y funciones vitales de los organismos (maduración sexual, crecimiento, desarrollo)
  • Salinidad: La mayor parte de las especies marinas han desarrollado estrategias adaptativas para mantenerse en equilibrio osmótico con el medio que los rodea. Los cambios en la salinidad varían la densidad específica del agua influyendo en la flotabilidad de los organismos. En general, la salinidad del agua de mar oscila entre 34-36 °/oo, aunque en las zonas costeras pueden ocurrir variaciones debidas a los aportes de agua dulce, desagües pluviales, evaporación, etc.
  • pH: El pH normal del agua de mar es de alrededor de 8,2. Las variaciones influyen sobre la actividad enzimática y las reacciones fisiológicas de los organismos.
  • Oxígeno: Elemento de vital importancia para los organismos ya que es fundamental para llevar a cabo los procesos de intercambio gaseoso, a excepción de las bacterias anaeróbicas. La cantidad de oxígeno disuelto puede variar cuando hay polución en áreas relativamente cerradas o en zonas litorales con gran abundancia de algas.
  • Luz: Uno de los factores más importantes que determina la distribución de los organismos. Las algas están confinadas a la zona eufótica para disponer de energía y gran parte de los animales se localizan en esta zona o cercanos a ella. Las variaciones lumínicas provocan migraciones del fito y zooplancton, movilizando a su vez a los organismos que los secundan en la cadena trófica
  • Sustrato: Factor primordial a tener en cuenta dado que los organismos incrustantes necesitan una superficie donde desarrollarse; las características de dureza, textura, composición química, color e inclinación condicionan el asentamiento de las distintas especies.

Estos factores abióticos están estrechamente interrelacionados, ej. la fotosíntesis producida por las algas actúa sobre los niveles de oxígeno y dióxido de carbono. Esto afecta al pH del agua. Cuando disminuye el oxígeno, aumenta el dióxido de carbono y desciende el pH, lo que provoca una rápida descomposición bacteriana. La temperatura afecta la solubilidad del oxígeno siendo su concentración mayor en aguas más frías; por otra parte, altas temperaturas favorecen la evaporación modificando en consecuencia la salinidad del agua

Estudio de las bioincrustaciones

  • Balsas experimentales

Las balsas experimentales han sido diseñadas con el fin de llevar a cabo las tareas de investigación en aguas abiertas. Los períodos de estudio no deben ser inferiores a un año

Para realizar el estudio del desarrollo de la comunidad se sumergen simultáneamente tantas series de paneles como meses dure el ensayo (por ej. para un estudio anual se sumergen doce series de paneles tratados con inhibidores estáticos biológicos y no tóxicos (ej. cerámicas líquidas, transductores ultrasónicos, equipos ionizadores, etc.)

  • Biobox

En los ensayos con biobox se efectúan con sustancias antiincrustantes no tóxicas, de acuerdo con las propuestas mundiales de preservación del medio ambiente. (molusquicidas biológicos, emisores de frecuencias variables, inhibidores cerámicos, ionizadores, etc.)

Gracias a estos trabajos, actualmente se han diseñado modelos antiincrustantes de larga duración, no tóxicos y eficientes en niveles superiores al 95%.

Principales organismos incrustantes

  • Microfouling: bacterias, protozoos y diatomeas.
  • Macrofouling: animales: cirripedios, serpúlidos o gusanos con tubo, hidroides, moluscos, etc. y vegetales: algas verdes, marrones, etc.
  • Film primario: El desarrollo de una comunidad de organismos incrustantes sobre una superficie sumergida da origen a la formación de la película que modifica las características originales del sustrato. Continúa con la formación de un “film” inicial, biopelícula o “microfouling”

Este “filme” está compuesto por una asociación de microorganismos, productos de secreción, partículas de materia orgánica e inorgánica, detritos, areniscas y limo. Entre los organismos predominantes están las bacterias y las diatomeas, que producen abundante material mucilaginoso, protozoos, dinoflagelados, hongos y esporas de algas.

La primera colonización bacteriana en medio marino produce grandes cantidades de ácidos polisacáridos y proporciona una superficie aprovechable para la subsiguiente colonización microbiana.

Los primeros organismos que llegan al sustrato son pequeñas bacterias en forma de bastón de menos de 0,8 µm de longitud, que se asientan durante las primeras horas de inmersión. En las siguientes 6-8 horas lo hacen formas de mayor tamaño (cocoidales, espiraladas), pertenecientes a los géneros Pseudomonas, Achromobacter, Flavobacterium. Al cabo de 24 horas de exposición se encuentran bacterias pediceladas y en forma de capullo, tales como Caulobacter e Hyphomicrobium, así como las primeras diatomeas y protozoos.

Después de 24 horas, la población de bacterias puede alcanzar la cantidad de 2.000.000, y 78.000.000 después de 96 horas. Las diatomeas contadas se pueden incrementar de 940 a más de 8.000 en el mismo período. Para los protozoos, larvas de cirripedios y otros organismos tendrán un incremento similar.

  • Diatomeas: Organismos unicelulares microscópicos de filiación vegetal que pueden vivir aisladas o en colonias, suspendidas en el agua (diatomeas planctónicas: Skeletonema costatum) o fijadas a sustratos sumergidos (diatomeas bentónicas: Achnanthes longipes)
  • Protozoos: Organismos unicelulares microscópicos de filiación animal, solitarios de vida libre (Euplotes), sésiles solitarios (Vorticella) o sésiles coloniales (Zoothamnium). Colonizan los sustratos sumergidos después de las bacterias y diatomeas que les sirven de alimento.
  • Las especies de bacterias que constituyen la biopelícula y el grado de envejecimiento de esta influyen en la fijación y desarrollo de los organismos del “macrofouling”, pudiendo modificar las condiciones físicas y químicas del sustrato.
  • Algas. Las algas marinas juegan un papel importante en el “fouling”, particularmente sobre sustratos artificiales sumergidos en aguas someras donde la luz es suficiente para que lleven a cabo sus funciones fotosintéticas, por ello es común encontrar distintas especies de algas en la parte superior de sustratos fijos y flotantes.

Las algas en general forman característicos cinturones constituidos principalmente por distintas especies de Enteromorpha (algas verdes) y Ectocarpus (algas pardas), de distribución cosmopolita. Son particularmente tolerantes al estrés ambiental como se evidencia en sus abundancias en la inestable línea de flotación y sobre la zona de salpicadura de las estructuras flotantes. Tienen un alto potencial reproductivo. Cada filamento de Enteromorpha es capaz de producir cien millones de células reproductoras.

En la mayoría de las algas, el asentamiento inicial es seguido rápidamente por un proceso de adhesión activo que involucra la secreción de un material adhesivo entre la membrana que reviste la espora y el sustrato.

Después de unos minutos la pared comienza a desarrollarse alrededor de las células y tras 4 horas alcanza un grosor sustancial. De este modo, en un corto período se logra una considerable protección física y química, que impide remover con facilidad la zoospora una vez que se ha adherido a una superficie. Esporas de Enteromorpha pueden asentarse sobre sustratos en flujos de agua con velocidades superiores a 20 kms/h.

  • Poríferos (esponjas). Las esponjas forman un importante grupo de animales bentónicos que se hallan distribuidos en todas las profundidades y latitudes.

Como estructuras de sostén presentan espículas que pueden ser calcáreas, silíceas o de fibras de espongina. Las formas larvales son planctónicas (anfiblástulas o parenquímulas según sean calcáreas o demospongias respectivamente). Son de difícil identificación a simple vista, siendo necesaria la observación de las espículas bajo microscopio debido a la diversidad y estructura de estas.

  • Hidrozoos. Los hidrozoos son cnidarios polimórficos, es decir que en una parte de su ciclo de vida pueden presentarse como pólipos coloniales y en otra como medusas.. Desde el punto de vista del “fouling” interesan los pólipos debido a que son los que se fijan sobre los sustratos duros, generalmente forman colonias constituidas por numerosos individuos que se especializan en distintas funciones.
  • Antozoos. Los antozoos son cnidarios polipoides en los que no se observa la forma medusa. Los pólipos pueden ser solitarios (anémonas de mar) o bien agruparse en colonias (corales).
  • Anélidos. Se consideran aquellas especies que resultan relevantes desde el punto de vista del “fouling”, es decir aquellos poliquetos que construyen tubos arenosos o calcáreos.
  • Poliquetos. Dentro del grupo de gusanos que forman tubos arenosos, Polydora ligni es la especie más abundante. El primer estadio larval es libre, planctónico (trocófora), luego se alarga y segmenta hasta llegar al estadio de 15-16 segmentos (setígeros) en que la larva es bentónica y busca un sustrato donde adherirse para formar su habitáculo. Se encuentran entre los primeros colonizadores de los sustratos inertes limpios. En etapas más avanzadas de desarrollo de la comunidad ofrecen sustrato secundario para el asentamiento de individuos de su misma u otras especies.
  • Moluscos. Los moluscos incluyen una gran variedad de formas marinas, terrestres y de agua dulce, provistas generalmente de valvas de carbonato de calcio y conquiolina, con un cuerpo dividido en cabeza, pie y masa visceral.

Sólo los bivalvos con biso y los que se adhieren al sustrato por cementado directo de una de sus valvas son importantes dentro de la comunidad del “fouling”. En su mayoría, los bivalvos son de sexos separados y liberan gametas al mar donde se fecundan y desarrollan primero en larvas trocóforas y luego en larvas velíger; pasada la etapa juvenil buscan un sustrato donde adherirse. Existen familias de bivalvos sésiles con pie reducido, que se adhieren al sustrato por medio de fuertes filamentos cómeos llamados bísales o del biso secretados por una glándula del pie, como por ejemplo en los mejillones. Para la formación del filamento del biso, el pie ejerce presión contra el sustrato duro, fluye una secreción glandular a lo largo del mismo y sale por su extremo endureciéndose en contacto con el agua de mar; al retirarse el pie queda por detrás un filamento completamente formado. A continuación, el pie secreta otro filamento en una nueva localización, y por último el molusco queda amarrado por una masa de filamentos. La mayoría de las especies pueden desprenderse y readherirse permitiendo al individuo moverse de un lugar a otro.

La mayor parte de los bivalvos son alimentadores de filtro, en los cuales las branquias, además de la función respiratoria, han asumido la de atrapar partículas alimenticias.

Dentro de los moluscos, además de los mencionados, existen otros representantes importantes desde el punto de vista de las perforaciones o excavaciones que hacen sobre distintos sustratos. Por ejemplo, Teredo produce grandes daños en pilotes y cascos de barcos de madera, la galería que excava se va agrandando a medida que el animal aumenta de longitud; los adultos pueden alcanzar hasta 30 cm

La actividad perforante de muchas especies como Petricola queda restringida a bancos de arcilla y roca blanda, otras como Pholas y Bornea son capaces de perforar cemento armado y roca relativamente dura. Hiatella árctica puede destruir diques y muelles de cemento, tiene 2,5 cm de longitud y excava agujeros de unos 15 cm de profundidad. El bivalvo Litophaga taladra piedras calizas por medio de un proceso químico; secreta un mucus ácido que ablanda la roca a nivel del punto a excavar.

  • Artrópodos. Crustáceos. Si bien este grupo está representado por numerosas especies pertenecientes a distintas subclases, órdenes y familias, cabe mencionar que desde el punto de vista del “fouling”, los cirripedios y los anfípodos tubícolas son considerados los más relevantes

El asentamiento inicial de los cirripedios es sólo una adhesión mecánica producida por la succión hidráulica de las copas ubicadas en el extremo de las anténulas de las cipris (7,5 dyn/cm2). Esta adhesión inicial soporta una corriente de agua de 186,4 cm/seg (=3,6 nudos); luego se refuerza por un cemento adhesivo que no es esencial para alcanzar la adhesión permanente

Una vez que la cipris se fija, comienza la metamorfosis hacia la forma adulta, se despoja de su cutícula quitinosa y secreta un caparazón de placas calcáreas, frágiles y transparentes al principio, que se ajustan unas con otras formando un cono truncado

  • Bríozoos. Los briozoos son animales coloniales sedentarios, arborescentes o rastreros. Las colonias exhiben una gran variedad de formas y hábitats, las cuales a simple vista pueden ser confundidas con otros organismos sedentarios tales como hidrozoos, ascidias coloniales o a menudo con algas. Pueden formar delicadas matas en las cuales los individuos están en series formando numerosas ramas. También pueden extenderse sobre el sustrato formando capas blandas o calcáreas en forma de encaje.
  • Ascidias. Las ascidias son animales marinos sésiles, de hábitos filtradores, que pueden vivir en forma solitaria o colonial. Una de sus principales características es la presencia de una túnica de naturaleza química semejante a la celulosa. Habitan desde aguas costeras hasta grandes profundidades, siempre adheridas a sustratos duros. La estructura esencial de una ascidia solitaria, como Ciona intestinalis, está constituida por un cuerpo adherido por su base, con un sifón inhalante y otro exhalante en el extremo opuesto libre. Son hermafroditas y sus huevos son liberados al mar donde se fertilizan y desarrollan en larvas “renacuajo” de menos de 1 mm de longitud, nadan durante unas horas, pierden su extremo caudal, se fijan y metamorfosean en adultos.

Clasificación, descripción y problema común

Bacterias

  • Forman películas delgadas en el objeto sumergido.
  • Se reproducen por simple división.
  • Facilitan la fijación de otros organismos.
  • Resistentes a los tóxicos corrientes.

Hongos

  • Aparecen conjuntamente con las bacterias.
  • Al desarrollarse forman una especie de red.
  • Procesos fermentativos Habilidad para formar asociaciones con otros organismos.

Diatomeas

  • Vegetales simples Productoras de oxígeno y de materia orgánica.
  • Se reproducen por simple división celular o sexual. Dependen de la luz.
  • Sumamente resistentes a la toxicidad de uso corriente. Interfieren en la solubilización de los tóxicos.

Algas

  • Cianofíceas.
  • Clorofíceas.
  • Rodofíceas.
  • Feofíceas.
  • Tienen coloración característica.
  • Se reproducen sexual y asexualmente.
  • Dependen de la luz.
  • Suelen ser resistentes a las pinturas tóxica.
  • Son resistentes a cambios de salinidad y temperatura.

Protozoos

  • Animales unicelulares
  • Su principal alimento son las bacterias y las diatomeas
  • Facilitan la fijación de otros organismos.
  • Poco resistentes a los tóxicos.

Celenterados

  • Hidrozoos
  • Antozoos
  • Poseen tejidos diferenciados. Ciclo vital compuesto de una fase medusa y una fase pólipo (hidrozoos) o solamente por pólipo (antozoos).
  • Resistentes a la acción de tóxicos.
  • Estructura calcárea permanente, que sirve de sustrato a nuevos organismos

Briozoos

  • Colonias con aspecto de vegetales.
  • Se reproducen tanto sexual como asexualmente.
  • Fácilmente eliminable por tóxicos comunes.

Moluscos

  • Gasterópodos.
  • Pelicípodos.
  • Tubo digestivo completo. Adherencia baja (gasterópodos) o muy alta (pelicípodos).
  • Poca resistencia a los tóxicos frecuentes.

Anélidos

  • Cuerpo segmentado interna y externamente.
  • Región cefálica perfectamente diferenciada.
  • Alta adherencia.
  • Constituyen puntos de corrosión.
  • Se fijan sobre la película de. bacterias, diatomeas y pro­tozoos.

Crustáceos

  • Cirrípedos.
  • Exoesqueleto constituído por quitina.
  • Respiran por branquias.
  • Se alimentan de diatomeas y protozoos.
  • Muy resistente a los tóxicos Producen, debido al fenómeno de aireación diferencial, una intensa corrosión.

Tunicados

  • Ascídaceas.
  • Animales cordados.
  • Hermafroditas y autoestériles Fecundación externa.
  • Componente más frecuentemente de las incrustaciones marinas.
  • Dejan espacio donde se acumula H2 S O4 como producto de putrefacción biológica.

Impactos del biofouling en los procesos industriales

Las industrias de todo el mundo extraen enormes volúmenes de aguas marinas (desalinizadoras) o aguas superficiales continentales para enfriar sus procesos operativos, (plantas de energía, instalaciones petro químicas, incineradores de desechos, etc.). Además, debido al desequilibrio hídrico, cada vez más acuciado, las plantas de desalinización constituyen una alternativa al utilizar el agua de mar como fuente para producir agua potable o agua de proceso. Otros grandes complejos procesadores se ubican en territorios costeros, y utilizan agua de mar para enfriamiento o agua de reposición. Las instalaciones de admisión pueden estar abiertas, ubicadas directamente en la orilla del mar, o utilizando una tubería de admisión sumergida con un cabezal de admisión ubicado debajo del nivel del mar.

En el caso del agua de mar, organismos bióticos en fases primeras de su estadio de vida, como son las larvas de una variedad de organismos marinos incrustantes ingresan al sistema de admisión, como mejillones, ostras, percebes, hidroides, etc. Estas especies de macrofouling pueden provocar problemas operativos importantes debido al bloqueo del sistema de agua de enfriamiento, p. Ej. condensadores e intercambiadores de calor. Para garantizar la confiabilidad operativa, se debe aplicar una estrategia efectiva de mitigación de incrustaciones.

Las estructuras de admisión y los conductos de agua de enfriamiento son, en general, entornos ideales, que proporcionan condiciones óptimas para el asentamiento y el crecimiento de las incrustaciones. El flujo continuo de agua de mar proporciona suficiente oxígeno y nutrientes, el flujo de agua es turbulento, es oscuro y no hay depredadores.

El proceso de asentamiento comienza con un acondicionamiento químico de las superficies para crear condiciones óptimas para la colonización por organismos incrustantes en un patrón razonablemente estándar. En primer lugar, se depositan moléculas orgánicas, seguidas de la colonización por microorganismos, que en su fase sésil producen "limo", creando una llamada biopelícula. De aquí en adelante, la colonización de las superficies por otros organismos se hace posible. Tanto las especies de micro incrustaciones como las macro incrustantes constituyen la comunidad global de bioincrustaciones.

Los organismos macro incrustantes se incorporan al sistema de admisión como larvas, que se asientan en las superficies y se desarrollan como adultos si las condiciones son adecuadas. Como expuse en la primera parte de este documento, existe una amplia gama de especies sésiles que pueden causar problemas de macro incrustación, como bivalvos, percebes, hidroides, gusanos tubulares, anfípodos de construcción de tubos, briozoos y ascidias. los organismos incrustantes producen un aumento irreversible en la rugosidad de la pared, ya que después de morir, parte del animal permanece en la superficie. Por lo tanto, es muy importante evitar el asentamiento de las larvas macro incrustantes en el sistema de admisión y agua de enfriamiento desde el inicio de la operación. Los organismos incrustantes se asentarán en la superficie de las tuberías de admisión y pueden, en competencia por el sustrato, crecer uno encima del otro formando capas gruesas.

De todas las especies de bioincrustaciones, los bivalvos (mejillones, ostras y almejas) y los percebes causan serios problemas operativos a los sistemas industriales de agua de refrigeración. Los hidroides también pueden causar problemas operativos, especialmente cuando ensucian los sistemas de filtro o forman capas duras en aguas con altas concentraciones de sedimento. Los hidroides pueden actuar como una estructura de banda y de esta manera filtrar las partículas de sedimento para formar obstrucciones. Además, se sabe que los hidroides ensucian tamices con mallas pequeñas. Las medidas para controlar las especies de bivalvos también controlarán a las otras especies de bioincrustaciones sésiles dependiendo de su tolerancia al tratamiento. La tasa de crecimiento depende de la especie, la temperatura del agua y la disponibilidad de nutrientes.

Impacto del biofouling

Una industria que utiliza agua de mar para fines de abastecimiento o enfriamiento puede sufrir la acumulación de bioincrustaciones de una biomasa potencial de hasta cientos de toneladas en dos años. Como consecuencia, el flujo de agua de enfriamiento se interfiere debido a la disminución del diámetro de la tubería y al aumento de la rugosidad de la pared. Esto da como resultado una mayor pérdida de carga y una disminución de la eficiencia de la estación de bombeo. La pérdida de carga es causada principalmente por la cabeza ascendente, las tuberías de admisión (incluido el sistema de cloración) y las pantallas.

Tanto el diámetro de la tubería como la rugosidad de la pared se ven afectados por las bioincrustaciones. La pérdida de carga sobre una tubería está determinada por las velocidades de flujo, la rugosidad de la pared y las pérdidas locales. Las pérdidas locales son pequeñas en comparación con las pérdidas debido a la rugosidad de la pared y, por lo tanto, se descuidan. Además, las pérdidas locales son demasiado específicas para que un determinado sistema las tenga en cuenta. La pérdida de carga, ΔH, puede calcularse de la siguiente manera

donde λ es el factor de fricción, L la longitud de la tubería [m], D el diámetro de la tubería [m], v la velocidad [m / s], g la aceleración gravitacional [m / s2], Re el número de Reynolds y k el valor de rugosidad [m].

Además de la pérdida de carga, existe un riesgo continuo de bloqueo de los tubos del condensador, válvulas, orificios y otros lugares constreñidos por organismos que se desprenden. Solo en Europa, las empresas pierden millones de euros debido a la bioincrustación, a menudo no cuantificables debido a la falta de información.

Mitigación del biofouling

Los productos utilizados para combatir plagas tendrán que ser sometidos a controles estrictos antes de su comercialización en la UE. Se ha aprobado en la Eurocámara un nuevo reglamento sobre el uso de biocidas que tiene por objetivo proteger la salud y el medio ambiente y agilizar el proceso de autorización de nuevos productos.

La nueva directiva actualiza la legislación de 1998 que regula el uso y la comercialización en la UE de los biocidas que se utilizan en el tratamiento de las aguas.

No a las sustancias tóxicas:

La nueva normativa introduce controles más estrictos en el procedimiento de aprobación de los productos, con el objetivo de prevenir la inclusión de sustancias tóxicas que puedan afectar a la salud o al medio ambiente. Las sustancias más perjudiciales, como las cancerígenas, las que tienen efectos adversos sobre la fertilidad o las que afecta a los genes y a las hormonas, quedarán prohibidas.

Para evitar el asentamiento de la bioincrustaciones, existen opciones biotecnológicas que son altamente eficientes y al mismo tiempo cumplen las exigencias y normas de compatibilidad con el medio ambiente.