Estamos viviendo una creciente crisis del agua que amenaza nuestra supervivencia y la del planeta. Es por ello que el Día Mundial de los Humedales 2021 se presenta como una nueva oportunidad de sensibilizar al mundo sobre el valor de los humedales, pues su destrucción impide que la naturaleza pueda reponer toda el agua que estamos utilizando. Desde Ramsar, dedicada a la acción nacional y la cooperación internacional, trabajan cada año en pro de la conservación y el uso racional de los humedales y sus recursos.
Si bien nuestro planeta parece estar lleno de agua, solo el 2,5% es agua dulce, estando almacenada en su mayoría en los glaciares, casquetes polares o acuíferos subterráneos. De ella, menos del 1% puede utilizarse y los humedales proporcionan la mayor parte de ella.
Agua, humedales y vida, inseparables
El crecimiento de la población, la urbanización y los patrones de consumo ejercen una presión insoportable sobre los humedales y el agua que contienen. De hecho, según Ramsar, el uso del agua se ha multiplicado por seis en los últimos cien años y aumenta en un 1% cada año. De cara al futuro, se prevé un aumento del uso del agua en los sectores industrial y energético de un 24% de aquí a 2050 y, a este ritmo, para ese mismo año se necesitarán un 70 % más de alimentos y un 14 % más de agua para la agricultura con una población mundial estimada de 10.000 millones de personas; unas cifras muy preocupantes teniendo en cuenta que, según el informe de FAO sobre el impacto medioambiental del despilfarro de alimentos, cada año se desperdician 1.300 millones de toneladas de alimentos de la granja a la mesa, y el agua utilizada para obtenerlos equivale al caudal anual del río Volga, el río más largo de Europa.
Al problema que presenta este desarrollo hay que sumarle el cambio climático ―temática central del Día Mundial de los Humedales 2019―, que exacerba más las consecuencias sobre la crisis del agua mundial (cabe recordar aquí que casi el 75% de los desastres naturales están relacionados con el agua). De hecho, el fenómeno está reduciendo las aguas superficiales y subterráneas en regiones ya áridas, provocando una mayor competencia por el agua y el consecuente surgimiento de los conflictos relacionados con el recurso hídrico. Es tal la magnitud del problema, que la inseguridad hídrica era un factor clave en los conflictos de al menos 45 países en 2017.
Vídeo: Pablo González-Cebrián/iAgua.
El impacto de la pérdida de humedales
Los humedales, ya sean de agua dulce o agua salada, son cruciales para sustentar a la humanidad y a la naturaleza. No solo captan y almacenan agua de lluvia y recargan los acuíferos, también regulan la cantidad y el abastecimiento de agua proporcionando agua en el momento, el lugar y la cantidad adecuados, y mejoran la calidad del agua eliminando y absorbiendo contaminantes. ¿Sabías que más de mil millones de personas dependen de los humedales para su sustento? Considerados el ecosistema más valioso, los humedales brindan servicios valorados en 47 billones de dólares estadounidenses cada año, según cifras de National Geographic.
En cuanto a la biodiversidad ―temática del Día Mundial de los Humedales 2020―, el 40 % de las especies del mundo viven en humedales y cada año se descubren doscientas especies nuevas de peces solo en los humedales de agua dulce. Sin embargo, desde hace años se viene advirtiendo de que se ha perdido casi el 90 % de los humedales desde 1700, y los que quedan están desapareciendo tres veces más rápido que los bosques. Como consecuencia de ello, el número de especies está disminuyendo más rápido que en ningún otro momento de la historia.
Cómo conservar los humedales
La gran importancia de los humedales para la vida humana y el planeta en general, hace que debamos prestar atención a nuestro comportamiento respecto a ellos y el agua, así como los procesos que suceden en su entorno. Podríamos tener agua suficiente valorando y gestionando mejor los humedales y el agua, considerando a ambos como una responsabilidad de todos. Para Ramsar, la clave está en cinco puntos:
En definitiva, debemos impulsar acciones a escala local, nacional e internacional (en el marco de este Día Mundial de los Humedales y fuera de él), integrando la gestión del agua, la tierra y los recursos con el fin de brindar un máximo de bienestar social y económico sin comprometer la sostenibilidad de los ecosistemas y, con ello, la de generaciones futuras.