Connecting Waterpeople

Se encuentra usted aquí

Otra estupidez humana relacionada con el agua (y el coronavirus)

  • Otra estupidez humana relacionada agua (y coronavirus)

La crisis que atraviesa España sobre el Coronavirus (COVID-19) está poniendo en jaque al Gobierno, a los servicios sanitarios y a la propia población. Es en esta última en la que recae, bajo mi punto de vista, la mayor responsabilidad. Y, es que, tanto el Gobierno central como los autonómicos emiten baterías de medidas a adoptar para intentar frenar el número de contagios; un fin para el que también trabajan sin descanso los servicios sanitarios. Pero, ¿qué puede hacer el resto de la población? Sencillo. Hacer caso a las recomendaciones, y esto es muy importante, que provengan de comunicaciones oficiales

Parece algo obvio, pero no lo es. El miedo y la estupidez humana son el peor enemigo en una crisis como esta. Mensajes de Whatsapp, documentos manipulados en una captura de pantalla o simples rumores que se propagan como la pólvora a través de nuestros teléfonos móviles (véase el caso de la compra en masa de las mascarillas o del papel higiénico que, a no ser que la OMS diga lo contrario, el coronavirus no provoca diarrea), han llegado a miles de personas para provocar aún más histeria si cabe. Como ya escribió mi compañera Águeda García de Durango en su blog basándose en la información aportada por la OMS y otras fuentes oficiales, son muchas las informaciones que se han extendido entre la población sobre el COVID-19 y no todas ellas son verdad. Por desgracia, estas no dejan de llegar y lo que es peor aún, son difundidas por influencers con millones de seguidores que los escuchan y hacen caso a lo que dicen, mostrando una falta de responsabilidad enorme. 

El miedo y la estupidez humana son el peor enemigo en una crisis como esta

Se trata de Paula Gonu, una influencer española que ha hecho un flaco favor a una situación en la que las autoridades piden calma y colaboración siguiendo las recomendaciones de la OMS y el Minsiterio de Sanidad, difundiendo a través de su cuenta de Instagram que beber agua caliente ayuda a prevenir el contagio de coronavirus. Sin ninguna base científica, Paula Gonu aseguraba a sus dos millones de seguidores que beber agua caliente era bueno porque "a una temperatura de 27 grados o superior se supone que no vive este virus". Un razonamiento de base erróneo, teniendo en cuenta que el cuerpo humano se encuentra ya de por sí a una temperatura superior: 36 grados.

Como era de esperar, la lluvia de críticas no tardó en llegar. A través de las redes sociales, fue duramente juzgada (con razón) y tildada de "inculta" e "irresponsable", viéndose obligada a redactar un breve comunicando en el que sugería "hacer caso a los médicos" y admitiendo que ella no tenía "ni idea". 

Para finalizar, por aquí dejo algunas recomendaciones de la cuenta oficial del Gobierno de España con información de interés para la ciudadanía sobre cuestiones de salud pública, que estas si provienen de alguien con autoridad.