En conmemoración al Dia Mundial del agua, la ONU ha dispuesto que el tema de este año sea "No dejar a nadie atrás". Se trata de una adaptación de la promesa central de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible: todo el mundo debe beneficiarse del progreso del desarrollo sostenible.
Una de las metas del Objetivo 6 de Desarrollo Sostenible (ODS 6) consiste en garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos de aquí a 2030. Por definición, eso significa no dejar a nadie atrás.
Pues bien, la escasez de agua ya afecta a cuatro de cada 10 personas en el mundo (OMS), unos 2,1 millones de personas viven sin agua potable en sus hogares y del resto de la población mundial que si tiene agua potable, se estima que sus 80% de aguas residuales retornan al ecosistema sin ser tratadas o reutilizadas (UNESCO).
En Bolivia, 19.20% de la población no tiene acceso a fuentes mejoradas de agua, lo que equivale a 1.925.233 personas. El déficit de agua afecta a 13.1% de la población urbana (860.092 personas) y a 37.7% de la población rural (1.223.571 personas). (Informe de avances hacia el cumplimiento del Derecho humano al agua y saneamiento en Bolivia para vivir bien.
En Bolivia, 19.20% de la población no tiene acceso a fuentes mejoradas de agua
Se prevé que la demanda de agua aumente de manera significativa en todo el mundo en las próximas décadas. Además del sector agrícola, que es responsable del 70% de las extracciones de agua del mundo entero, se prevén grandes aumentos de la demanda de agua en la industria y en la producción de energía. La urbanización acelerada y la ampliación de los sistemas municipales de suministro de agua y saneamiento también contribuyen al aumento de la demanda. Esta demanda incrementará además bajo los efectos del cambio climático qué mediante la variabilidad en el clima, supone cambios en el régimen lluvias además de variaciones temporales y espaciales.
En Santa Cruz de la Sierra se tienen 9 cooperativas de agua potable, SAGUAPAC la más grande, extrae agua de aproximadamente 80 pozos para garantizar una cobertura de casi 97% de su zona de operación, con una producción anual de 76 millones de metros cúbicos desde 5 estaciones de bombeo, con pérdidas de agua de carácter operacional o comercial de 17 % (EPSAS 2017, Indicadores de Desempeño). Y un 60% aproximadamente de cobertura en alcantarillado en su zona de operación.
A nivel departamental en Santa Cruz, solo el 34% de los municipios tienen alguna cobertura en saneamiento de aguas residuales (El Deber), es decir 66% del agua captada y utilizada es devuelta a los ríos sin ningún tratamiento.

¿Que nos dicen todos estos números?
Primero, ¿de dónde viene toda esta cantidad de agua?
En Santa Cruz de la Sierra toda el agua potable proviene de aguas subterráneas, estos reservorios son alimentados a su vez por dos grandes sistemas hídricos de la región:
- Las serranías del Parque Nacional Amboró, donde en su cuenca media y alta se capta gran humedad gracias a la cobertura boscosa, que luego también al escurrir al Río Piraí alimentan las aguas subterráneas de este sector. De hecho, se estima que el 40% de las aguas subterráneas captadas dependen de este parque nacional.
- Los grandes arenales de infiltración de Lomas de Arena y Porongo-Urubó, que mediante sus lagunas cada vez más pequeñas (como la Laguna Capiguara) y la preponderancia de arenales y pastizales dispersos facilita la infiltración de agua.
Cabe resaltar que estos, se encuentran actualmente presionados por la expansión agrícola (cultivos de ladera) y urbana (proliferación de urbanizaciones).
Segundo, ¿a donde se va toda el agua potable utilizada?
Como ya vimos, SAGUAPAC que acapara la mayor población de socios cuenta con una cobertura del 60% de alcantarillado, las otras cooperativas tienen valores similares o menores en cobertura de este servicio. Pues bien, las aguas residuales urbanas son transportadas mediante la red de alcantarillado a las Plantas de tratamiento PTAR’s, solo SAGUAPAC cuenta con 6 de ellos distribuidos en la ciudad, en ella se utilizan tratamientos no convencionales de sistemas de lagunas, donde el agua va pasando de una laguna a otra mientras se va purificando con la ayuda de microorganismos y aireadores, una vez tratada ésta desemboca en humedales artificiales para luego ser descargada nuevamente a los ríos. Se considera que mayormente estas aguas no pueden ser utilizadas nuevamente para consumo humano sino solo para consumo agrícola.
El resto de las aguas donde no existe alcantarillado, simplemente es descartada en pozos sépticos que con el pasar el tiempo infiltra a su vez a las aguas subterráneas comprometiendo la calidad de estas (Actualmente SAGUAPAC perfora sus pozos a 350mts para garantizar la calidad de estas); en las zonas periurbanas y también rurales (No olvidemos que solo 34% de los municipios cruceños realizan algún tratamiento a sus aguas residuales) también se descarga el agua directamente a los cuerpos de agua superficiales como ríos o curichis, esto genera grandes problemas de contaminación de agua para las poblaciones aguas abajo, además para la fauna piscícola, acuática y terrestre.
Finalmente
En el municipio cruceño se tiene un consumo de 140 litros por habitante cada día, uno de los consumos más altos del país, si consideramos la procedencia del agua en nuestra metrópoli y tomamos en cuenta el destino de éstas. Debemos reflexionar acerca de nuestros hábitos de consumo, por ejemplo, se puede llegar a desperdiciar hasta 12 litros cada minuto de un grifo abierto, y casi 340 litros/día por fisuras en las tuberías domiciliarias según la AEMA.
En este 22 de marzo, debemos reflexionar: una gota de agua es refrescante, una gota de agua es poderosa, una gota de agua es más necesaria que nunca.
