De lenguaje áspero, pero sensual, el ritmo narrativo de esta novela de José Luis Sampedro parece acompasarse al fluir del propio Tajo, que sirve de fondo para la peripecia de la cuadrilla de gancheros que acompañan aguas abajo los troncos recién cortados. Una novela de gran contenido simbólico cuyo tema último es la dignidad humana.