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Cantabria: una región generosa en agua

Sobre el blog

Observatorio del Agua de la Fundación Botín
El Observatorio de Agua es el primer think tank interdisciplinar del agua en España. Fue creado en el año 1998, y se especializa en el análisis de temas vinculados al agua de relevancia nacional y global. 

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  • Río Saja-Besaya (wikipedia/CC)
    Río Saja-Besaya (wikipedia/CC)
  • Artículo elaborador por Silvia Díaz Alcaide (investigadora del Observatorio del Agua de la Fundación Botín) y Pedro Martínez Santos (Profesor titular de la Universidad Complutense de Madrid).

Cantabria trasvasa al resto de España alrededor de 15.500 hectómetros cúbicos de agua al año y a cambio importa unos 5.000. Hablamos evidentemente de agua virtual, ese agua que ha sido necesaria para producir los bienes de consumo que cualquier región intercambia con el exterior. Tanto las exportaciones como las importaciones cántabras se corresponden mayoritariamente con productos del sector agroalimentario, y más en concreto con los de origen animal.

Por otra parte, el principal consumidor de agua en Cantabria son los bosques, cuya huella hídrica supone casi veinte veces la suma de los usos urbanos e industriales. Esto se traduce en la abundancia de espacios naturales, incluyendo destinos tan sugerentes como el Parque Nacional de los Picos de Europa o el Parque Natural de Saja-Besaya, amén de los vistosos valles rurales que caracterizan el interior de la Comunidad Autónoma. Teniendo en cuenta que la naturaleza es uno de los principales activos – y atractivos – turísticos de Cantabria, resulta fácil deducir que el agua no solo constituye un capital natural importante para la región, sino también un bien económico de primera magnitud.

La moderna gestión de los recursos hídricos resulta bastante más compleja que el manejo del propio ciclo hidrológico

Estas son algunas de las principales conclusiones del estudio "Huella hídrica y agua virtual de Cantabria", desarrollado recientemente por FCC-Aqualia y el Observatorio del Agua de la Fundación Botín. Su objetivo ha consistido en proporcionar una nueva visión sobre el balance hidrológico de la Comunidad Autónoma, así como desarrollar indicadores susceptibles de informar la toma de decisiones a nivel político, estableciendo el impacto de la utilización de los recursos hídricos tanto a nivel de municipioscomo de comunidad autónoma, y buscando identificar posibles tendencias de interés. Asimismo, se ha pretendido cuantificar el impacto del consumo de agua incorporada en los bienes y servicios producidos e intercambiados por Cantabria y determinar la huella hídrica de su territorio. Los trabajos han contado con el beneplácito y colaboración del Gobierno de Cantabria.

Puede decirse que la planificación hidrológica se enfoca tradicionalmente en función de la oferta de agua y de las demandas de los usuarios y ecosistemas, refiriéndose casi en exclusiva al agua azul. De esta manera, cuando el agua escasea es frecuente pensar en términos de aumentar su disponibilidad mediante la construcción de nuevas infraestructuras o la incentivación de un consumo eficiente. Menos frecuente es considerar el papel del agua verde y cómo su comercio a través del intercambio de bienes y servicios puede contribuir a paliar el déficit de recursos en cada región. La realidad es que la moderna gestión de los recursos hídricos resulta bastante más compleja que el manejo del propio ciclo hidrológico, ya que en ella intervienen multitud de factores sociales, económicos, culturales y medioambientales. Así, cada vez es más necesario disponer de herramientas que permitan aunar las perspectivas tradicionales con análisis más amplios, enfocados a vincular los usos del agua con la actividad económica y con la realidad social y geográfica de cada territorio. En este sentido, cabe reafirmar la utilidad de la huella como un indicador que permite identificar –y en su caso potenciar– aquellos sectores de actividad cuya rentabilidad social, económica y ambiental resulte óptima.

Cantabria, con una importante ventaja comparativa en lo que respecta a la disponibilidad de agua verde, es contribuyente neta de agua virtual al conjunto de la península, y, si bien en menor medida, también al resto del mundo. Esto nos permite poner en valor una de las grandes riquezas del territorio cántabro en relación al conjunto del territorio nacional, dando relevancia al hecho de que la abundancia de agua en Cantabria repercute en último término en favor de todos.