La jornada, en sesión de mañana, se estructuró en una breve presentación a cargo de Juan Mora, Director del Secretariado de Investigación de la universidad, de los organizadores, Joaquín Melgarejo (director del IUACA) y Domingo Zarzo (presidente de AEDYR). Ambos centraron su discurso inaugural en la viabilidad de la reutilización, que dependerá de las circunstancias locales para evaluar el equilibrio entre los costos y los beneficios generados. Probablemente el principal beneficio en la mayoría de los casos sea el valor del agua dulce que se intercambia por un uso urbano o industrial de mayor valor, o de calidad garantizada en cuanto al uso agrícola (cabe recordar aquí que la mitad del agua depurada que se usa para riego en toda España se genera en la Comunidad Valenciana y Murcia, alrededor de 166 hectómetros cúbicos al año). A continuación, la jornada se dividió en dos mesas redondas. La primera de ellas, bajo el título "Aplicación de la norma y nueva regulación europea", contó con la presencia de José Vicente Benadero, subdirector de Planificación e Infraestructuras Hidráulicas de la Consellería de Agricultura, Medio ambiente, Cambio climático y Desarrollo rural de la Generalitat Valenciana; Francisco Javier Ferrer, comisario de aguas de la Confederación Hidrográfica del Júcar; y Raquel Iglesias, directora de programa en el Área de Tecnología del Agua CEH-CEDEX.
Bajo el título "La aplicación del RD en la Comunitat Valenciana", José Vicente Benadero radiografió el estado actual de la reutilización, partiendo de datos numéricos, tales como el volumen anual de agua depurada (431 hm3) o los valores de la reutilización directa (133 hm3) e indirecta (82 hm3), ambas dos dedicadas, en el 97%, al uso agrícola. También se cotejaron las 41 plantas de tratamiento terciario con las que cuenta la comunidad autónoma, así como la constatación según la cual si bien existe una capacidad de regeneración alta dada la tecnología disponible, no se aprovecha todo el potencial para ampliar el uso de agua regenerada en los municipios y áreas del interior debido a las limitaciones en la distribución del agua regenerada más allá de los límites del entramado litoral, donde se encuentran la práctica totalidad de las plantas. Otra acotación interesante fue la preocupación existente en cuanto a la calidad de las aguas salientes debido a la concentración de contaminantes emergentes y a la contaminación bacteriológica. Por último, se constató como el precio del agua regenerada sigue siendo el factor determinante a la hora de potenciar la regeneración de las aguas, más teniendo en cuenta el principio de recuperación de costes que exige la Directiva Marco del Agua en su artículo 9. En este sentido, Benadero considera que los recursos no convencionales deberían tener un trato especial y no asumir dicho coste de recuperación puesto que su promoción libera agua de los cursos fluviales, minimizando con ello la presión humana sobre los mismos y sus ecosistemas.
La ponencia de Javier Ferrer, titulada "Experiencias de aplicación del RD 1620/2007 en la CHJ" se centró en los aspectos técnicos que conlleva el control de los procesos de regeneración de las aguas depuradas desde un punto de vista normativo pero también haciendo hincapié en los principales retos del sector, a saber: controlar la autorización de vertido, regular las concesiones, afianzar el autocontrol sanitario y tener un enfoque global en cuanto a los costes asociados al tratamiento de las aguas. Con ello se buscó esclarecer e intuir algunas de las consideraciones a tener en cuenta ante los cambios previstas en dicho RD a fin de equipararse con los requisitos de calidad y salud pública exigentes a nivel nacional y comunitario. En este sentido, esta presentación servirá de punto de partida de las aportaciones de Raquel Iglesias, quién cerró el primer bloque de la jornada con la presentación titulada "Borrador normativa europea sobre reutilización de aguas depuradas". Iglesias focalizó su intervención en las bases técnicas, de gestión y políticas que se están debatiendo ante la actualización de la normativa europea en materia de regerenación de aguas que se visualiza en el marco de la economía circular. En este sentido, presentó algunos de los principales aspectos modificables que están sobre la mesa de debate: 1) un mayor alcance de las aguas intervenidas (bruta, depurada, infiltrada, de acuífero, etc.); 2) el control de la calidad de las aguas será más restrictivo y se vinculará a la gestión de riesgos; 3) más dependencia de informes y acreditaciones externas sobre la gestión de todas las fases del proceso de regeneración; y 4) plazos de validación de los nuevos requisitos físicoquímicos y de gestión con carácter gradual para con ello asegurar la implicación del sector.
La segunda mesa redonda, titulada "Usuarios de aguas regeneradas" contó con la presencia de 5 ponentes. Jaime Berenguer, ingeniero jefe de explotación del Consorcio de Aguas de la marina Baja; Ángel Uribe, secretario de la Comunidad de Regantes del Canal Bajo del Algar; David Santacreu, coordinador de la doble red urbana de reutilización de Aguas de Alicante; Enrique Ortiz, director de proyectos y medio ambiente de Alacant group; e Ignacio Casals, coordinador de innovación de Hifragua y responsable de I+D+i de Aguas de Alicante.
Cada una de las presentaciones puso de relieve la transversalidad existente en el uso del agua regenerada, con ejemplos prácticos de aplicación de dichas aguas a distintos sistemas socioeconómicos como són el regadío, el ámbito urbano o la industria. Berenguer inició la segunta parte de la jornada con la ponencia "Intercambio de aguas blancas por aguas regeneradas", con la que introdujo el estado de las instalaciones con las que cuenta el CAMB para potenciar el uso del agua regenerada entre el binomio urbano-agrícola. Una colaboración que se fraguó en los años 80 y que cuenta con una red de 3 EDARs (Villajoyosa, Benidorm y Altea) que dan servicio a las tres comunidades de los ámbitos adyacentes y que ha permitido garantizar cada uso en función de su periodo de más demanda. La segunda ponencia, "Reutilización para regadío", a cargo de Ánger Uribe, se enmarca también en los años 80 como punto de inicio de los trabajos realizados por la Confederación Hidrográfica del Júcar para dotar de recursos hídricos a las cosechas de Algar, punto de lanza del Canal Bajo del Algar. Una infraestructura que se ve condicionada por la salinidad de las aguas entrantes, cuya calidad no garantiza el buen proceder en los procesos productivos de los cultivos dominantes de la zona. En este sentido, se puso de relieve los casos de establecimientos turísticos que han realizado técnicas de geotermia que han alterado los valores de conductividad de las aguas comunes. La tercera ponencia, titulada "Implantación de la reutilización urbana de aguas", por David Santacreu, puso de manifiesto el consumo de agua regenerada de la ciudad de Alicante, aproximadamente 1 hm3, el 70% del cual utilizado en zonas verdes, lo que supone una recompensa doble: no se ha destinado agua blanca para usos no potables y se ha enverdecido la ciudad, aumentando con ello la resiliencia de la misma a los efectos del cambio climático (ola de calor, noches tropicales, etc.). La siguiente intervención, a cargo de Enrique Ortiz y bajo el título de "Reutilización en la industria" se centró en el caso práctico de la empresa HeladosAlacant y en su concienciación y capacidad para autoabastecerse con la regeneración propia del agua que emplea en sus procesos productivos. Un autoconvencimiento que, sin embargo y en palabras del propio Ortiz, tuvo que hacer frente a un largo proceso de cumplimento de la normativa existente del que debería mejorarse la interacción con los organismos competentes a fin de asegurar procesos industriales exentos de impacto ambiental. Cerró la sesión Ignacio Casals con la ponencia "El coste de no reutilizar", donde pudimos contrastar los resultados obtenidos de una política pro-regeneración con el coste de la no acción. En este sentido, valgan algunas de las diapositivas de la presentación como resumen de las principales cuestiones tratadas desde la ejemplaridad.
