Hace un par de semanas publiqué un post sobre la creación de un envoltorio sostenible y biodegradable para almacenar el agua. Hoy les toca el turno a las iniciativas enfocadas al lavado de ropa y de automóviles con el objetivo de reducir considerablemente el consumo de agua. De este modo, damos un paso más en la reducción del consumo de agua y de nuestra huella hídrica en dos usos que implican un importante uso de este preciado bien.
En nuestros hogares utilizar la lavadora comporta un consumo de entre 42 y 62 litros por cada lavado para una carga de 7 kilos de ropa. Si tenemos en cuenta una familia que utiliza la lavadora cada día, el consumo anual de agua puede ser superior a los 22.600 litros de agua al año. Si esta cifra la multiplicamos por todas las familias de un determinado país, la cifra puede ser mareante. Sin querer emular a José Bono y su capacidad para hacer operaciones matemáticas, podemos deducir que lavar la ropa sin agua supondría una importante reducción en el uso de agua.
Poner la lavadora supone un consumo de entre 42 y 62 litros de agua en cada lavado. Al año, el uso de agua puede ser superior a los 22.600 litros por familia
Lavadoras sin agua
Una empresa británica, Xeros Technology Group, a través de la lavadora Hidrofinity, ha ideado un sistema de lavado a través de una máquina especial que habilita un proceso que sustituye gran parte del agua por polímeros de nylon, una fibra con propiedades para atraer la suciedad. Añadiendo 23.000 pequeñas esferas de este material -con un peso total de 6 kilos- una taza de agua y el detergente se obtiene la combinación perfecta para lavar la ropa con una ausencia casi total de agua.

Entre un 50 y un 80% menos de agua
Aplicando esta tecnología en lavadoras domésticas, la reducción del agua sería del 50%, mientras que en maquinaria para usos comerciales como la hostelería (que implica utilizar el número de esferas hasta las 70.000 con un peso total de 20 kilos), el ahorro llegaría hasta el 80 %. Una cifra muy a tener en cuenta, sobre todo para el sector turístico. Además del importante ahorro de agua, este innovador sistema permite la reducción del 50% en el consumo de energía.
Una nueva tecnología puede reducir el consumo de agua entre un 50 y un 80%, sustituyendo el agua por polímeros de nylon
La cera de carnauba
Lavar un coche con agua puede suponer un consumo de entre 500 y 700 litros de agua, tal y como publicó El País en una noticia. También la cifra puede adquirir niveles mareantes si la multiplicamos por todos los coches que hay en un determinado país.
Una empresa, Ecowash, utiliza un nuevo sistema de lavado de coches sin agua, recurriendo a un producto ecológico hecho a partir de cera de carnauba. Este producto natural ya se utiliza para otros campos como la alimentación (chucherías y chocolates refinados) así como para cremas de calzado.
Lavar un coche comporta utilizar hasta 700 litros de agua en cada lavado. Existen productos ecológicos que evitan el uso del agua en el lavado
El invento para lavar el coche consigue aislar la suciedad presente en la carrocería y poder retirarla de un modo cómodo. Para entendernos, el compuesto de cera de carnauba ablanda la suciedad (lo que habitualmente hacemos con agua) y permite su fácil retirada. De este modo se facilita el ahorro de agua de un modo considerable que, según la compañía, se reduce hasta en 200 litros en cada lavado.

Todas estas soluciones evidencian que hay camino para recorrer en el ahorro del agua y en el fomento de un uso más sostenible. En un contexto de cambio climático, es necesario innovar para tener un mundo mejor.