"Qué llueva qué llueva, la virgen de la cueva", "abril, aguas mil", "como agua de mayo". Estos son algunas de las expresiones de la cultura popular relacionadas con la lluvia...de agua.
Hago esta apreciación porqué se conocen otros tipos de lluvias con elementos que nada tienen que ver con el líquido elemento y que también son recogidas por la tradición popular, con expresiones de hace años y que pasan de generación en generación. "Están lloviendo sapos y culebras" es, en este sentido, otra expresión que también nos suena y que estaría basada en hechos reales, tal y como analizaré en este post. En el mundo anglosajón, esta frase sufre una leve variación: en vez de llover sapos y culebras llueven gatos y perros (it's raining cats and dogs).
La cultura popular tiene expresiones que ya reflejarían el fenómeno de las lluvias con animales
La lluvia de ranas
Aunque la precipitación de estos anfibios nos puede recordar a un pasaje de la película Magnolia (1999), la lluvia de ranas es un hecho que se ha producido desde la antigüedad. El autor griego Ateneo (200 d.C), relató en una de sus obras una intensa lluvia de ranas en la zona del Peloponeso. Unos cuantos siglos más tarde, concretamente en el XX y ya en España, se produjo el mismo fenómeno en Gibraltar (1915) y más recientemente, en 2007, en el barrio alicantino de Rebolledo.
En el Antiguo Egipto, en la Grecia del año 200 d.C., en la Edad Media y en la época contemporánea se ha registrado el fenómeno de la lluvia de animales
Peces caídos del cielo
No sólo las ranas pueden caer del cielo como la lluvia. Se han producido casos en que han precipitado peces. Si en el caso de las ranas la imagen puede ser para muchos desagradable, en el caso de los peces, en cambio, se puede considerar como un regalo del cielo, y nunca mejor dicho. En Sri Lanka, en mayo de 2014, se produjo una intensa lluvia de peces que llegó a formar un grosor de hasta 8 centímetros en calles y tejados. Los vecinos, para no desaprovechar esta comida, organizaron un gran banquete con más de 50 kilos de pescado y guardaron el excedente para tener reservas posteriores.

Además de las ranas y los peces, entre los animales que han llovido en alguna ocasión podemos encontrar ratas (ciudad noruega de Bergen, en 1578), medusas (en Bath, Inglaterra, en 1894) y caracoles (Chester, Pensilvania, en 1870).
Las causas
Hace algunos meses publiqué un post reflexionando si las nubes son capaces de desalinizar el agua. Esta idea me vino a la cabeza cuando vi imágenes de trombas marinas que conectan las nubes con el mar y pensé si cabía la posibilidad de que el agua del mar llegara a las nubes para convertirse, posteriormente, en agua de lluvia. En el caso de las lluvias de ranas y peces, se daría un proceso similar al de mi conjetura: estos animales, ubicados en su hábitat natural, serían aspirados por fuertes y potentes trombas de agua, e incluso por huracanes, que posteriormente caerían al suelo. Hay que tener en cuenta que es complicado, por no decir imposible, saber dónde y cuándo lloverá algo que no sea agua.

Si os preguntáis si los animales sobreviven, hay de todo: algunos sí, otros mueren, otros acaban despedazados y, otros congelados. Este fue el caso de un calamar, que en 1997 cayó en la cabeza de un pescador coreano, al que dejó inconsciente.
El lugar donde más peces llueven
Hay una localidad de Honduras que tiene el honor de ser la que más veces registra el fenómeno de la lluvia de peces. El Departamento de Yoro, como mínimo, registra este fenómeno una vez al año, según informan los medios locales. Esta coincidencia hace que la gente atribuya al fenómeno connotaciones milagrosas. Si miramos la ubicación de este municipio, comprobaremos que está a primera línea de costa, algo que puede deberse al fenómeno de las trombas marinas.

¿Lluvia de arañas?
En los últimos días se ha hecho viral un vídeo grabado en Brasil, en el estado de Minais Gerais, con lo que parece ser una lluvia de arañas. La imagen es bastante desagradable, sobre todo para aquellos que no les gustan estos insectos de ocho patas. Sin embargo, hay que aclarar que en realidad el caso que ha salido en los medios no se trataría de una lluvia sino de un medio de transporte bastante ingenioso.
Como si se tratara de Spiderman o incluso de Batman, algunas especies de arañas utilizan una técnica llamada como "ballooning", que consiste en desplazarse en enjambre a zonas elevadas, para saltar después. Las arañas liberan un flujo de tela que utilizan como un planeador para desplazarse a otras zonas de un modo rápido.