El vicepresidente de la Diputación Provincial de Almería, Javier Aureliano García, ha señalado este miércoles que la institución negocia con Acuamed para llevar una "inyección de agua desalada" a los municipios de la provincia cuyo suministro se puede ver alterado por variaciones en los niveles de los compuestos presentes en el agua potable.
Según ha explicado el vicepresidente tras una rueda de prensa en el Palacio Provincial, la institución puso en marcha el pasado 1 de agosto la nueva potabilizadora que ha permitido dar agua "apta para el consumo" al núcleo urbano de Carboneras y en la pedanía de El Argamasón a través de Galasa. Asimismo, el agua que se sirve se mezcla actualmente con agua desalada.
No obstante, desde la Diputación se negocia con Acuamed para servir este agua desalada al resto de municipios y poner precio a la misma, ya que según ha recordado el vicepresidente este agua es "tres veces más cara", lo que entra en conflicto con la intención de la institución de no subir "ninguna tasa". En este sentido, ha criticado que el anterior gobierno central impulsara la política de desaladoras en lugar de priorizar los trasvases para servir al levante almeriense.
Con esto, García ha explicado que la Diputación trata también de negociar otros convenios suscritos con Acuamed por los anteriores equipos de gobierno de la institución, ya que por alguno de ellos se llega a pagar unos "15 millones de euros a cambio de prácticamente nada". Así, la Diputación se ha propuesto renegociar ciertos acuerdos "que han perjudicado mucho" a la institución para que resulten "menos gravosos".
El portavoz del equipo de gobierno ha apuntado que por el momento los vecinos a los que se suministra el agua desalada mezclada no pagan más en sus facturas, ya que en caso de que se produzca un sobrecoste éste lo asume la Diputación. Pese a ello, García ha apuntado que aún no se puede determinar si más adelante las tafifas subirán o no, ya que de ello depende la negociación con Acuamed.