El Consorci de la Costa Brava firmó el pasado 16 de diciembre el contrato de conexión a la red de Aigües Ter Llobregat (ATLL), que permitirá garantizar el abastecimiento en alta de los municipios de Lloret de Mar y Tossa de Mar sin sobrepasar los límites de extracción de los pozos propios impuestos por la Agència Catalana de l’Aigua (ACA). El contrato contempla una aportación de 500.000 m3/año, un 8% de la demanda total de la zona. La mayor parte de este volumen procederá de la desaladora de Blanes.
La conexión a la red de ATLL representa para las localidades de Lloret de Mar y Tossa de Mar un incremento muy notable de la garantía de este abastecimiento
El abastecimiento en alta consiste en la captación, transporte y potabilización de agua, para suministrarla a cada uno de los ayuntamientos consorciados. La conexión a la red de ATLL representa para las localidades de Lloret de Mar y Tossa de Mar un incremento muy notable de la garantía de este abastecimiento, ya que permite una explotación más flexible de los pozos y evita la sobreexplotación. También asegura el abastecimiento ante situaciones imprevistas y más graves que pudieran afectar a la ETAP o a los acuíferos, como por ejemplo una importante sequía.
El acuerdo firmado entre las dos entidades prevé la aportación de un volumen regular de 42.000 m3 de agua al mes, lo que ha permitido al Consorci de la Costa Brava obtener un mejor precio. Si por necesidades inesperadas el consumo de volúmenes debiera ser superior al establecido en el contrato, el coste del servicio se incrementaría en función del agua finalmente suministrada desde ATLL.
Tanto el Consorci como los alcaldes de los municipios implicados valoran muy positivamente que este tema se haya desarrollado de manera "tan transparente". "Antes todo se hacía sin pedir la opinión de los ayuntamientos implicados", ha señalado el presidente del Consorci, Carlos Páramo, quien ha añadido que "esta nueva manera de trabajar también se está llevando a cabo en el estudio y propuesta de tarifas, con la intención de llegar a la tarifa única con un consenso absoluto".
La conexión a la red de ATLL supone también una reducción del gasto que ha venido soportando el CCB hasta hoy en el abastecimiento en alta de la Costa Brava sur. Hasta finales de 2012, la ACA cobraba la tarifa de utilización del agua (TUA) en el ámbito del bajo Tordera, una tasa que sólo se aplicaba en esta cuenca a todo tipo de extracciones de agua del medio y que pretendía financiar las actuaciones realizadas para proteger el acuífero. Para el CCB, esta tasa supuso un coste de casi un millón de euros al año. La tasa desapareció después de la entrada en vigor, en marzo de 2012, del nuevo canon del agua, de aplicación en toda Catalunya.
Antecedentes
En las últimas décadas los municipios de la Costa Brava sur y del Maresme norte se han abastecido principalmente del acuífero del tramo bajo del río Tordera. A pesar de ser una cuenca históricamente rica en recursos hídricos, la elevada explotación para usos de abastecimiento municipal, riego agrícola y usos industriales, junto a la sequía de finales de los años 90 y principios del 2000, llevó a la sobreexplotación del acuífero y a la pérdida de calidad debido a la intrusión marina.
Por este motivo, el 6 de febrero de 2003 la ACA declaró oficialmente la sobreexplotación provisional del acuífero del Tordera medio y los acuíferos del bajo Tordera, con el fin de regular las extracciones que se hacían, y promover y ejecutar la construcción de una planta desaladora (ITAM) en Blanes con la que abastecer una parte de las demandas municipales de la zona.
Desde entonces y hasta finales del 2011, el modelo de gestión de los recursos en el bajo Tordera se basó en el funcionamiento de la ITAM al máximo de su capacidad (10 hm3/año) y su suministro para usos exclusivamente municipales, complementando las extracciones del acuífero, las cuales se vieron reducidas en esa cantidad. Cabe destacar que durante este período también se llevó a cabo la recarga del acuífero del tramo más inferior del Tordera con agua regenerada de la EDAR de Blanes, lo que significó el retorno al río de entre 2 y 3 hm3/año adicionales, de un agua que hasta el momento era vertida al mar.
A partir del 2011 y hasta finales del 2012, por exigencias de la situación económica general y de la ACA en particular, el régimen de funcionamiento de la ITAM se redujo para aportar exclusivamente los volúmenes que hubieran representado una extracción en exceso de los pozos, protegiéndolos de la sobreexplotación. Así, en el caso del abastecimiento en alta de las poblaciones de Lloret de Mar y Tossa de Mar, la aportación media de la ITAM de Blanes entre el 2003 y el 2011 fue de 2,05 hm3/año, cantidad que disminuyó hasta 0,4 hm3/año en el 2012. En el año 2013, con la ITAM de Blanes ya integrada en las infraestructuras de la red ATLL y con el contrato ATLL - CCB pendiente de firmar, no se ha recibido agua de la ITAM de Blanes.