El embalse de Villalba de los Barros estaba considerado como uno de los lugares más importantes de la provincia de Badajoz para la observación de especies de aves poco frecuentes en Extremadura, como la pagaza piconegra, la canastera, el fumarel, el charrancito o las gaviotas. Todas ellas se habían instalado en gran número en las islas del embalse, aprovechando su tranquilidad y la defensa que ofrecen frente a depredadores.
Sin embargo, este año el embalse se ha convertido en una zona de ocio abierta, donde usuarios de embarcaciones, piragüistas, pescadores y curiosos no han dudado en acceder a las zonas más tranquilas y a las islas, provocando la espantada de las aves y la pérdida de puestas y pollos por las continuas molestias.
Lo sucedido, ante la total pasividad de todas las administraciones competentes, demuestra por un lado, la absoluta falta de sensibilidad con la naturaleza de estos ciudadanos que, viendo las evidentes molestias que producía su presencia en esas zonas del embalse, con la espantada de cientos de aves, han continuado recorriendo las mismas, indiferentes a ello y a los reproches de los turistas ornitológicos presentes. Por otro lado, se ha podido apreciar también la indiferencia de las administraciones extremeñas o su incapacidad para gestionar el turismo en embalses de una forma adecuada y compatible con los valores naturales que atesoran.
En opinión de Marcelino Cardalliaguet, Delegado de SEO/BridLife en Extremadura ”unas simples medidas de gestión, con indicaciones claras a los usuarios de embarcaciones y pescadores para evitar molestias graves, permitiendo su actividad en el resto del humedal, habrían sido suficientes para evitar el desastre ambiental ocurrido este año, en el cual se constata la pérdida de toda la reproducción de al menos siete especies presentes en la zona”.
SEO/BirdLife considera que este modelo de turismo es lamentable y dañino para los intereses de Extremadura y ofrece su total colaboración para mejorar la gestión del turismo en el medio natural, pero entre tanto y a la vista de la actual situación, tomará las medidas oportunas para exigir responsabilidades por lo ocurrido en el embalse de Villalba de los Barros.
En este sentido, SEO/BirdLife también informa que las especies migratorias afectadas están protegidas por la Directiva Europea de Aves, por la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad de España y por la Ley de Protección de la Naturaleza de Extremadura.
