Colombia presentó su contribución prevista determinada y la agricultura es protagonista

Estas contribuciones previstas y determinadas a nivel nacional (INDC en inglés) preceden al nuevo acuerdo climático global que se espera alcanzar en la cumbre del clima que se llevará a cabo en París (COP21), en diciembre de este año.

Con la de Colombia, ya son 59 las partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) que han presentado formalmente sus propuestas para El Acuerdo de París que entrará en vigor en el 2020[1], empoderando a todos los países a actuar para evitar el aumento de la temperatura media global por encima de dos grados Celsius y cosechar las muchas oportunidades que surgen de una necesaria transformación global de desarrollo limpio y sostenible.

La estrategia colombiana

Estas contribuciones previstas y determinadas a nivel nacional (INDC en inglés) preceden al nuevo acuerdo climático global que se espera alcanzar en la cumbre del clima

Para lograr la meta de reducir en un 20% las emisiones, Colombia ejecutará medidas de adaptación y mitigación. En el documento oficial reconoce que el verdadero desarrollo sólo es posible, si se identifican y se afrontan los riesgos del cambio climático. “Para que Colombia pueda alcanzar sus objetivos de desarrollo, paz, equidad y educación, y para que logre sostenerlos en el largo plazo, resulta indispensable identificar y aprovechar, en los diferentes sectores de la economía nacional, oportunidades de aumento en la competitividad, productividad y eficiencia, que a su vez reduzcan las emisiones de GEI. Al mismo tiempo es indispensable que el país continúe adaptándose para lograr un desarrollo compatible con el clima”, se puede leer en la INDC colombiana.

También se indica que Colombia considera fundamental que su INDC contemple elementos de mitigación, adaptación, y medios de implementación. Para el país la consolidación de su INDC constituye una oportunidad para catalizar esfuerzos a escala nacional y sub-nacional, a través de la planificación de una economía innovadora y competitiva, y a su vez, resiliente y baja en carbono.

A la fecha, Colombia cuenta con once planes territoriales de adaptación al cambio climático formulados[2], que requieren iniciar la implementación de sus acciones priorizadas. Estos planes son el insumo para que los tomadores de decisión identifiquen la vulnerabilidad de su territorio, y definan medidas de adaptación que a su vez sean incorporadas en los diferentes instrumentos de planificación del desarrollo y de ordenamiento territorial.

Así mismo, seis sectores prioritarios de la economía (transporte, energía, agricultura, vivienda, salud, comercio, turismo e industria) incluirán consideraciones de cambio climático en sus instrumentos de planificación, y estarán implementando acciones de adaptación innovadoras en cabeza de los ministerios que vienen avanzando en la elaboración de sus planes sectoriales de adaptación.

La agricultura representa el 44.6% de las emisiones de GEI provenientes de Colombia[3], con grandes oportunidades tanto de adaptación como mitigación. En ese sentido, la INDC destaca como una de las acciones priorizadas las Mesas Técnicas Agroclimáticas (MTA), una iniciativa liderada por el Programa de Investigación en Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS) y el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR) en la que participan gremios, corporaciones autónomas regionales (CAR), universidades, asociaciones de productores, Unidades Municipales de Asistencia Técnica (UMATA) y centros de investigación como la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (Corpoica) y el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT).

Boletines agroclimáticos regionales publicados por CCAFS

En la INDC se menciona que quince departamentos colombianos participarán de estas mesas. Actualmente se implementa en tres: la MTA de Córdoba, coordinada por Corpoica y la Federación Nacional de Cultivadores de Cereales (Fenalce); MTA Sucre, coordinada por Corpoica y la Federación Nacional de Arroceros (Fedearroz) y la MTA Cauca, coordinada por la Fundación Procuenca Río Las Piedras; cada una de las mesas produce su respectivo boletín regional que a la vez se articula con una mesa nacional de actores del agro que publica el boletín nacional.

La meta de estas mesas propuesta en la INDC es llegar, al año 2030, a un millón de productores colombianos recibiendo información agroclimática para facilitar la toma de decisiones en actividades agropecuarias[4], acción que ya está en curso gracias a la plataforma Agronet, la estrategia de gestión, organización y difusión de conocimiento mediante procesos eficientes de transferencia tecnológica, siendo la fuente de información del sector agropecuario más consultada en Colombia, con una base de datos de 281.000 inscritos a noviembre de 2014.

CCAFS se ha unido a esta iniciativa mediante la firma de un convenio con el MADR para fortalecer la capacidad de adaptación del sector agropecuario a la variabilidad y al cambio climático y mejorar la eficiencia del uso de los recursos en los sistemas productivos en regiones priorizadas, así como para escalar el alcance de la plataforma Agronet y que cada vez llegue a más productores.

Preparándose para la COP21

La secretaria ejecutiva de la CMNUCC, Christiana Figueres, está alentando a los países a presentar sus INDC tan pronto como puedan, lo que subraya su compromiso y apoyo hacia un resultado exitoso en París. Los gobiernos acordaron presentar sus INDC antes de llegar a la cumbre del clima en diciembre.

Toda la información como documentación sobre el diseño y preparación de INDC así como en fuentes de apoyo para la preparación, está disponible en la página web de la CMNUCC.