Con el objeto de dar solución definitiva a los continuos problemas de olor y sabor que afecta a los clientes de Viña del Mar, Concón y Quintero, la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS) solicitó a ESVAL que ejecute todas las acciones instruidas y dar su máxima atención para asegurar el cabal cumplimiento de la Norma de Calidad de Agua Potable durante el presente período para las plantas de tratamiento de agua potable de Concón y San Juan.
Los problemas de percepción de olor y sabor que se presentan entre los meses de septiembre a noviembre en esas comunas de la V Región, persisten desde hace unos años a la fecha. Esto ha significado que la SISS sancionara a ESVAL de 110 UTA ($53 millones), 160 UTA ($ 77 millones), y 190 UTA ($93 millones de pesos), por incumplimiento en los años 2011, 2012 y 2013.
Los procedimientos sancionatorios realizados por la SISS fueron considerados como antecedentes relevantes por parte del Servicio Nacional del Consumidor (SERNAC), para iniciar una demanda colectiva por las quejas interpuestas por los afectados durante el evento ocurrido en el año 2011.
El acuerdo conciliatorio le significa a la empresa sanitaria un desembolso de un poco más de 190 millones de pesos en compensaciones a los clientes, montos que serán abonados a las cuentas de los consumidores en la próxima facturación.
Esta compensación, incluye además, que si un cliente considera que sufrió un daño mayor al compensado, ejemplo daño moral, puede hacer reserva de derechos para defenderlos individualmente.
Además de los montos de las compensaciones, el acuerdo conciliatorio implica que ESVAL se allanará a pagar una multa de 25 UTM (Alrededor de $1 millón), además de incluir el costo del reclamo de quienes acudieron al SERNAC.
Fiscalización intersectorial
La Superintendencia de Servicios Sanitarios implementó un programa de fiscalización intersectorial, en coordinación con la Seremi de Salud de la Región de Valparaíso, con el propósito de mitigar las deficiencias en la calidad del servicio y dar una solución integral a los clientes afectados.
Entre ellas, monitorear la fuente de captación del Río Aconcagua en su última sección, principalmente en el estero Lajarilla que aporta este afluente, en la que se encontraba una descarga de Residuos Industriales Líquidos (RILES), proveniente de la embotelladora Embonor.
En el plan de acción realizado por las autoridades sanitarias se instruyó la clausura inmediata de este proceso a fines de 2011, dado que se constató que contribuyó a cambios en la calidad de la fuente de captación gatillando el aumento de percepción de olor y sabor en el agua potable producida por la planta ESVAL. Esta medida se mantiene hasta la fecha, e inclusive se ordenó al industrial la contención del estero Lajarilla, y su posterior limpieza.
Asimismo, la SISS realizó durante los años 2011, 2012 y 2013 un programa de monitoreo directo a la calidad de agua potable producida en la planta Concón, que concluyó incumplimiento en la NCh 409, los cuales fueron considerados para iniciar procedimientos sancionatorios contra la empresa.
Para el presente año, ESVAL deberá ejecutar todas las acciones instruidas por la SISS y dar su máxima atención para asegurar el cabal cumplimiento de la Norma de Calidad de Agua Potable durante el presente período, con el propósito de garantizar la potabilización del recurso dentro de los parámetros exigidos por la Norma.