Bonyic, la primera central de generación de energía hidráulica del Grupo EPM construida en el extranjero, comenzó su operación comercial en el mercado energético de Panamá, anunció este miércoles Juan Esteban Calle Restrepo, Gerente General de EPM y líder del Grupo EPM.
La hidroeléctrica es una planta generadora de energía hidráulica de 31,8 megavatios (MW) de capacidad, alimentada por las aguas de la quebrada Bonyic que se almacenan y regulan en un embalse de 18 hectáreas, un túnel de conducción superior a 3.621 metros y una presa de 44 metros de altura.
La primera turbina francis de eje horizontal para la generación de energía hidráulica entró en operación en enero pasado, la segunda estará a punto a finales de febrero y, la tercera, en la última semana de marzo próximo. La central cuenta con una línea de transmisión a 115 kV de aproximadamente 9,7 kilómetros de longitud entre la casa de máquinas y el distrito de Changuinola, para entregar la energía generada al sistema eléctrico interconectado de Panamá en la subestación Changuinola-Charagre.
En este sentido, Calle Restrepo informó que “la central Bonyic ya tiene contratos firmados de suministros de energía eléctrica a 15 años con empresas distribuidoras panameñas”.
La central
La central Bonyic, que fue construida por Hidroecológica del Teribe S.A. (HET), empresa del Grupo EPM, está ubicada en el distrito Changuinola, en la provincia Bocas del Toro, en el Noroeste de Panamá, frontera con Costa Rica. “Estamos muy satisfechos con el inicio de operaciones de Bonyic, porque esta planta de generación aportará a la confiabilidad del sistema eléctrico panameño y contribuirá a disminuir las tarifas de energía, al no ser una central térmica sino una planta de generación hidráulica y, con ello, aportará a la calidad de vida, el bienestar y la economía de las familias panameñas”, destacó Calle Restrepo.
Cabe señalar que durante la ejecución del proyecto se presentaron múltiples inconvenientes, como la ocurrencia de crecientes torrenciales que afectaron de manera significativa el área donde inicialmente se tenía prevista asentar la casa de máquinas, situación que obligó a modificar el diseño del proyecto de una casa de máquinas superficial a una subterránea. Además, los túneles de conducción y de descarga registraron una geología de una calidad inferior a la prevista en las exploraciones o estudios iniciales, obligando a unos diseños más robustos para garantizar la estabilidad de los mismos. El costo total de la inversión incluyendo los costos financieros alcanzó los USD 314 millones.
Modelo en trabajo con la comunidad
Uno de los aspectos más importantes en el desarrollo de este proyecto fue la puesta en práctica del modelo de gestión de EPM con las comunidades. Durante la construcción de la central, se dio un proceso de comunicación, diálogo, participación, consulta e interacción con las comunidades de Bonyic, Solón, Sieiyic, Sieikin, Cuykin, San San, Druy, Loma Bandera, La Tigra, Santa Rosa, y Sorí, en la zona de influencia, que permitió determinar las medidas de mitigación y el plan de compensación del pueblo indígena Naso.
Las obras de beneficio para la comunidad se fundamentaron en cuatro pilares: salud, educación, economía y cultura. Se destinaron recursos para infraestructura de vías (se construyeron 21,1 kilómetros de caminos, incluidos 18 puentes); al tiempo que se mejoraron y construyeron escuelas con siete centros informáticos, tres aulas escolares y dos comedores escolares; se otorgaron becas universitarias y se adelantaron actividades como la apertura de puestos de salud son su respectiva dotación; la optimización de acueductos en siete comunidades del Teribe; el refuerzo institucional para el pueblo Naso, el manejo del patrimonio arqueológico, y la reforestación o recuperación de áreas naturales, entre otras.
Adicionalmente, se generaron 1.400 empleos en el punto más alto de la ejecución de las obras, 33 % de ellos con personas de origen Naso.
La central de generación de energía eléctrica Bonyic es un hito en el crecimiento internacional del Grupo EPM, “porque le permite ganar experiencia en la gestión de un proyecto de generación fuera de Colombia, con reglas diferentes y una idiosincrasia distinta. Es un conocimiento que capitalizaremos para aplicar en otras naciones”, agregó Juan Esteban Calle Restrepo, líder del grupo empresarial.
