La Comisión insta a Bélgica, Grecia y Suecia a garantizar la recogida y el tratamiento adecuados de las aguas residuales urbanas, tal como exige la Directiva 91/271/CEE, sobre el tratamiento de las aguas residuales urbanas.
La Directiva protege la calidad del agua y la salud humana al exigir que los Estados miembros recojan y traten sus aguas residuales urbanas antes de su vertido al medio ambiente. En el caso de las aglomeraciones de 2 000 habitantes o más, el tratamiento requiere no solo la eliminación de sólidos, sino también la descomposición de las sustancias orgánicas utilizando bacterias.La información más reciente sobre el cumplimiento que se ha recibido de Bélgica muestra que, en doce aglomeraciones, no todas las aguas fueron tratadas adecuadamente. Se pide a Bélgica que garantice el pleno cumplimiento de la Directiva.
Los datos facilitados por Grecia revelan que en 289 aglomeraciones las aguas residuales urbanas no se recogen adecuadamente y que, por lo tanto, tampoco se tratan correctamente antes de su vertido. Ocho de estas aglomeraciones vierten en zonas sensibles. Además, Grecia se basa en gran medida en «sistemas individuales u otros sistemas adecuados» (por ejemplo, fosas sépticas), sin cumplir, no obstante, los correspondientes requisitos de la Directiva.
Durante la investigación de otro asunto contra Suecia por el incumplimiento de la Directiva sobre tratamiento de las aguas residuales urbanas, que está pendiente ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, quedó claro que Suecia había transpuesto incorrectamente varias normas de la Directiva, en particular sobre la medición de los parámetros de tratamiento. Por tanto, la Comisión envía sendas cartas de emplazamiento a estos tres países, que disponen ahora de cuatro meses para responder. De no hacerlo, la Comisión puede optar por enviar un dictamen motivado.