La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil ha abierto diligencias previas para investigar y determinar los daños al dominio público hidráulico por la caída al cauce del río Sil de los vagones del tren de mercancías descarrilado el martes 28 de julio en Sobradelo (Orense).
Los servicios técnicos del Organismo de cuenca continúan realizando un seguimiento de las posibles afecciones a la calidad de las aguas mediante muestreos periódicos, así como otras diligencias y labores de investigación, visualización de videos, fotografías de informes de guardería fluvial, con objeto de esclarecer los hechos y determinar, en su caso, los daños ocasionados al dominio público hidráulico y sus zonas de protección, y si estos fuesen constitutivos de infracción de la legislación de aguas, proceder a la incoación del correspondiente expediente sancionador.
De las investigaciones y averiguaciones realizadas por el personal de la Confederación Hidrográfica se desprende que los vagones habrían sido empujados de forma intencionada para que se produjera su caída por el talud. Es importante destacar que el Organismo de cuenca había informado de que esa operación con las características descritas por el interlocutor no sería autorizable.
Antecedentes
En la tarde del pasado martes 28 de julio de 2020 tuvo lugar el descarrilamiento de un tren de mercancías que circulaba en la línea Monforte-Ponferrada en las proximidades del núcleo de Sobradelo (Carballeda de Valdeorras). Durante los días posteriores ADIF (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) llevó a cabo diversas labores necesarias para la retirada del convoy y el restablecimiento de la circulación.
En la mañana del pasado domingo 2 de agosto, se recibe en la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil comunicado procedente de la Agencia Gallega de Emergencias (AXEGA) mediante el que se informa que, como parte de los trabajos de retirada de dos vagones descarrilados, dada la dificultad de su recuperación, y por cuestiones de seguridad, se pretende dejarlos caer hacia el cauce para posteriormente recuperarlos.
Operación no autorizada
Desde el Organismo de cuenca se informa de que dicha operación no es viable desde el punto de vista ambiental en la forma planteada, y desplaza al lugar a personal de vigilancia con objeto de recopilar información y realizar un análisis de la situación.
En la tarde de ese mismo día, se produce la caída de los vagones por el talud hacia el cauce. Ambos vagones quedaron depositados dentro del dominio público hidráulico, si bien uno de ellos acabó alcanzando el cauce de aguas bajas, provocando el enturbiamiento momentáneo del agua al entrar en contacto con las mismas. En consecuencia, por parte del personal de vigilancia se procede a la correspondiente toma de muestras en el cauce.