Se estima que Europa cuenta con recursos minerales sin explotar por valor de 100.000 millones de euros que yacen a profundidades de 500 a 1.000 m. Tras siglos de actividad minera, la mayor parte de los yacimientos minerales más accesibles del continente se han agotado. Sin embargo, todavía quedan recursos en las profundidades de minas inundadas abandonadas y en yacimientos subacuáticos que no se pueden explotar empleando técnicas mineras convencionales para terrenos secos.
Gracias a un novedoso sistema de minería subacuático desarrollado por el proyecto VAMOS, financiado con fondos europeos, en el futuro se podrán explotar yacimientos minerales que actualmente son inaccesibles. Al hacer posible la extracción mineral subacuática, el sistema robótico de explotación minera allana el camino para la reapertura de minas a cielo abierto abandonadas e inundadas que cuentan con cantera en lugar de pozos. La tecnología puede, asimismo, ampliar la vida útil de las minas a cielo abierto con elevadas tasas de desbroce en las que debe extraerse una gran cantidad de roca estéril para obtener una determinada cantidad de mineral o con problemas hidrológicos y geotécnicos. Y además, incluso puede dar lugar a la apertura de nuevas minas europeas con una menor huella medioambiental.
Con este fin, los socios del proyecto han finalizado con éxito su segundo ensayo de campo en la cantera inundada de Magcobar, en Silvermines, Irlanda. En 2017, el primer ensayo se llevó a cabo en un yacimiento de caolín a cielo abierto que estaba inundado y ya no se utilizaba en Lee Moor, Devon, Reino Unido. La tecnología probada consta de un vehículo minero de control remoto capaz de cortar rocas en fragmentos de 50 mm. Equipado con un sistema de espectroscopia láser, el vehículo puede evaluar los minerales en tiempo real, de forma que se reduce la cantidad de roca estéril extraída. El vehículo se lanza y recupera del agua empleando un buque de lanzamiento y recuperación (LARV) anclado. El material extraído se bombea hasta el LARV en la superficie y luego es enviado a través de un sistema de tuberías flotantes hasta una instalación de drenaje en la orilla para su posterior tratamiento, mientras que el agua sobrante se devuelve al pozo de la mina. La posición exacta del vehículo minero, la navegación y el conocimiento del entorno están controlados por un vehículo híbrido accionado a distancia.
Ventajas del sistema de minería subacuático
«El proceso no requiere personal de forma que es más seguro y dado que no hay polvo explosivos ruido ni vibraciones y no se están demoliendo grandes superficies de rocas para acceder a pequeñas cantidades de minerales tiene una menor huella medioambiental que la minería convencional» explica Jenny Rainbird de BMT Group Ltd empresa coordinadora del proyecto en una noticia publicada en el sitio web «The Engineer».
Esta tecnología innovadora también posee otras ventajas. En primer lugar, no se tiene que bombear constantemente el agua subterránea fuera de la mina, lo cual significa que se consume menos energía, de forma que el sistema también resulta más rentable. Además, el nivel freático local no se ve afectado, por lo que tiene un efecto reducido en el medio ambiente circundante. Asimismo, gracias al efecto hidrostático, se necesita menos energía para llevar el mineral a la superficie.
Actualmente Europa depende en gran medida de la importación de minerales para mantener sus industrias. La prometedora solución que propone VAMOS (¡Viable and Alternative Mine Operating System!) puede contribuir a un futuro suministro sostenible de estos minerales en Europa.
Para más información, consulte el sitio web del proyecto.