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Rosetta encuentra más de un centenar de parches de hielo de agua en el cometa 67P

Científicos de la Agencia Espacial Europea (ESA) han identificado más de un centenar de parches de hielo de agua de pocos metros de tamaño en la superficie del cometa al que 'vigila' la sonda Rosetta, 67P/Churyumov-Gerasimenko.

Esta investigación, publicada en 'Astronomy & Astrophysics', se ha realizado gracias a las imágenes de alta resolución que la sonda ha realizado cuando se encontraba a entre 10 y 100 kilómetros de distancia de la roca. Los investigadores se han centrado en el análisis de parches brillantes de hielo expuestos en la superficie del cometa.

Según han explicado, la base del estudio son los gases que salen del cometa y que son ricos en hielos. A medida que 67P se va acercando al Sol, su superficie se calienta y los hielos subliman en gas, que fluye lejos del núcleo, arrastrando partículas de polvo incrustadas en el hielo para formar la cola del cometa (llamada oficialmente coma).

Los científicos han identificado 120 regiones en la superficie del cometa

Pero algunos polvos del cometa también caen de nuevo en la superficie y la recubre con una capa delgada de material polvoriento que deja muy poco hielo directamente expuesto en la superficie. Estos procesos ayudan a explicar por qué el cometa 67P y otros cometas, observados en las misiones de sobrevuelo anteriores, son tan oscuros.

A pesar de esto, el conjunto de instrumentos de Rosetta ya ha detectado una variedad de gases, incluyendo el vapor de agua, dióxido de carbono y monóxido de carbono, que se cree que proceden de depósitos congelados por debajo de la superficie.

120 regiones brillantes

Usando las imágenes captadas de la roca, los científicos han identificado 120 regiones en la superficie del cometa que son hasta diez veces más brillantes que el brillo superficial medio. Algunas de estas características brillantes se encuentran en grupos, mientras que otras aparecen aisladas.

Y cuando se ha observado en alta resolución, muchas de estas regiones parecen ser cantos rodados que muestran manchas brillantes en sus superficies.

Así, los grupos brillantes, que comprenden unas pocas decenas de pequeñas rocas repartidas en varias decenas de metros, son, muy probablemente, el resultado de la reciente erosión o colapso de la pared de la zona, que ha revelado el material más fresco de debajo de la superficie cubierta de polvo, según explican los científicos.

Por el contrario, algunos de los objetos brillantes aislados se encuentran en regiones sin ninguna relación aparente con el terreno circundante. Estos se cree que son objetos que fueron 'levantados' de otros lugares del cometa durante el período de actividad cometaria, pero que no alcanzaron la velocidad suficiente como para escapar de la atracción gravitatoria del cometa.

En todos los casos, sin embargo, los parches brillantes fueron encontrados en áreas que reciben relativamente poca energía solar, como la sombra de un acantilado, y no se observaron cambios significativos entre las imágenes tomadas durante un período de aproximadamente un mes. Además, se encontró que eran más azules en el color en longitudes de onda visibles en comparación con el fondo más rojo, lo que es consistente con un componente helado.

Experimentos en laboratorios

Del mismo modo, el equipo realizó experimentos de laboratorio que pusieron a prueba el comportamiento del hielo de agua mezclado con diferentes minerales bajo la iluminación Solar (simulada), a fin de obtener más conocimientos sobre el proceso.

Con este sistema, descubrieron que, después de unas pocas horas de sublimación, se formó el manto un polvo oscuro de unos pocos milímetros de espesor. En algunos lugares éste actuó para ocultar completamente cualquier huella visible de hielo, pero los granos de polvo o trozos más grandes, de vez en cuando, se levantaban de la superficie y se trasladaban a otro lugar, exponiendo parches brillantes de hielo de agua.

"La superficie oscura y relativamente homogénea del núcleo del cometa 67P sólo se ve interrumpida por algunos puntos brillantes, que se pueden explicar por la presencia de un delgado manto de polvo compuesto de mineral refractario y materia orgánica. Los puntos corresponden a los lugares en los que se retiró este manto de polvo, revelando un subsuelo rico en agua con hielo por debajo", ha explicado Holger Sierks, investigador principal en el Instituto Max Planck.

¿Cuándo se formaron?

El equipo también especula sobre el momento de la formación de las placas de hielo. Una hipótesis es que se formaron en el momento de la última aproximación máxima del cometa al Sol, hace 6,5 años, con bloques de hielo expulsados en regiones en sombra permanente y su preservación durante varios años por debajo de la temperatura máxima necesaria para la sublimación.

Otra idea es que incluso a distancias relativamente grandes del Sol, el dióxido de carbono y monóxido de carbono podría expulsar los bloques de hielo. En este escenario, se supone que la temperatura no era todavía suficientemente alta para la sublimación del agua, de tal manera que los componentes del agua-hielo sobreviven a cualquier dióxido de carbono o hielo de monóxido de carbono expuesto.

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